El Principado libera en la costa occidental una cría de foca gris recogida en enero en Gijón

La cría, que pesaba casi nueve kilos, fue hallada con múltiples heridas en la zona dorsal del cuello y presentaba debilidad y deshidratación. Tras los primeros cuidados, «centrados en el suministro de antibióticos y vitaminas y la rehidratación», el animal fue trasladado al Acuario de Gijón, donde prosiguió su proceso de recuperación, «con una dieta específica para favorecer la recuperación de peso».

Bajo supervisión veterinaria y biológica diaria, los técnicos realizaron, asimismo, pruebas de natación cada día para valorar sus capacidades. Además «recibió alimento vivo para observar su instinto de caza y ayudar a su reintroducción al medio natural».

«Un aspecto clave para la recuperación de los animales es el mantenimiento de un escrupuloso aislamiento. Por eso, para no habituarlos a la presencia de humanos, se limitan los contactos a los tratamientos estrictamente necesarios», apuntan los expertos del Principado. Los agentes del Medio Natural mantendrán durante los próximos días un seguimiento sobre la foca para asegurarse de su buena reincorporación a su hábitat natural.

«La colaboración ciudadana es de gran importancia en la respuesta ante los varamientos de animales marinos y de la fauna silvestre en general. Ante una situación así, se debe informar a los servicios de emergencias», apuntan los expertos, que recomiendan «no acercarse al animal, ni tocarlo ni darle alimentos y seguir las instrucciones de la Guardería del Medio Natural».