El Principado tendrá una fiscalidad por concejos y una oficina para atraer emigrantes

Segundo paso. El grupo de expertos seleccionado para redactar un borrador de ley de Reto Demográfico terminó ayer su trabajo. El Consejo de Gobierno aprobará el texto y lo remitirá a la Junta General «a finales de diciembre o principios de enero. Estamos en tiempo» para su aprobación. En parte porque el punto de partida fue el dictamen aprobado por 43 de los 45 diputados («un consenso que es una rara avis en la política actual») y que incluía 219 medidas.

La norma tiene además «una premisa, el reto demográfico no tiene solución a corto y medio plazo, hay que pensar en términos de décadas». Para que la ley «perdure» al margen de los vaivenes políticos debe mantener «un amplio consenso» y ser entendida como «una política de Estado».

El proyecto marcaría todos los planes y normas posteriores, pues incluye la obligación de que calibren «su incidencia demográfica», como ahora ya valoran sus efectos sobre la economía y la igualdad de género, por ejemplo.

La medida estrella de la norma reside en «clasificar a los concejos en función de su perfil demográfico», algo que se irá revisando «de manera constante». Entrar en una u otra categoría «tendrá consecuencias y efectos. Las políticas serán diferentes para cada grupo de concejos y territorios atendiendo a su grado de despoblamiento, serán de tipo fiscal y otro tipo, y graduarán su intensidad en función del grado de despoblamiento», detalló.

La ley funcionaría así como «punto de apoyo de las políticas que planteen los próximos gobiernos del Principado». En esta legislatura y «como anticipo» se han ampliado las deducciones fiscales. Cofiño dio por asegurada la aprobación de las cuentas de 2023 («vamos a tenerlos y eso es una buena noticia») y enumeró el paquete de deducciones que incluirá para el reto demográfico.

En la declaración de la renta del año que viene los asturianos podrán acogerse a beneficios fiscales si tienen acogidos en su vivienda a un mayor de 65 años, pagan el alquiler de una vivienda de uso habitual, adoptan a menores de otros países o acojan a un menor. También hay deducciones por parto múltiple, familia numerosa, familia monoparental.

Habrá beneficios sobre los gastos que genere tener un hijo en centros de 0 a 3 años y la adquisición de libros de texto y material escolar. En zonas rurales en riesgo de despoblación se aplicará una deducción por nacimiento o adopción de segundo y sucesivos hijos, y habrá otra para quien se establezca en la misma zona como trabajador por cuenta propia o autónomo. La adquisición o rehabilitación de vivienda en estos concejos también estará bonificada. Se sumarán nuevas bonificaciones para las explotaciones agrarias. El paquete de estímulos incluye deducciones para padres y madres con hijos a su cargo hasta los 25 años, y otra para facilitar la emancipación de los jóvenes hasta los 35 años.

Las medidas se suman a las que ya incluía el presupuesto vigente, que permitía deducir el 10% de los gastos de transporte para menores de 25 años que salen a estudiar desde zonas en riesgo de despoblación y ayudas directas a la natalidad de 1.000 euros por nacimiento o adaptación, que el curso que viene subirá a los 1.200 si es un primer hijo y 1.700 los siguientes. «Son solo un anticipo» de las que se seguirán perfilando, previno.

Durante el coloquio celebrado en el Parador de San Pedro de Villanueva, el vicepresidente asumió que puede existe cierta percepción de abandono en las alas, «pero desde el punto de vista presupuestario no es así. Mantenemos unos servicios que son muy caros y a pesar de ello hay un despoblamiento creciente». Tener carreteras, escuelas, médico y banda ancha ayuda pero no basta. «Nos falta mucho músculo económico, que es lo que sujeta a la población y lo que tenemos que conseguir», instó.

Una herramientas para ello son los Fondos Next Generation de los que el Principado tiene asignados 600 millones, «400 ya en caja, y en licitación 300. Los efectos en la calle se irán viendo en los próximos meses».