El Principado cifra en 70 euros al año lo que llegará a pagar cada hogar por la basura

La revolución que vive Cogersa deja así tres preguntas inmediatas sobre la mesa: ¿cuánto más deben pagar los ciudadanos por sus desperdicios?, ¿hay forma de rebajar esa factura?, ¿qué se puede hacer con esas 160.000 toneladas de combustible? Sobre ellas habló la consejera de Transición Ecológica y presidenta de Cogersa, Nieves Roqueñí, en un encuentro informativo organizado por Europa Press.

Según indicó, el impacto del 'tarifazo'«está calculado» y hay ayuntamientos en los que puede pasar de los 50 euros por hogar actuales a entre 65 o 70 «como mucho» al año, lo que implica «entre euro y medio y tres euros por hogar al mes», indicó.

La cuenta admite matices. En el año 2022 Cogersa cobraba a los ayuntamientos 23,4 euros por cada tonelada de desperdicios mezclados. Se trata éste de un flujo estabilizado; los asturianos vienen arrojando al contenedor que no es para reciclar unas 350.000 toneladas al año. Por tanto, su procesado costó el pasado año 8,19 millones. Según el censo de hogares de 2020, en Asturias hay 455.500 viviendas, por lo que, aquel sistema salió a unos 17,9 euros por hogar y año.

Para 2024 la comisión delegada del consorcio aprobó el lunes una tarifa de 96 euros por cada tonelada de basura bruta. Eso implica que el coste de tratar esas 350.000 toneladas de desperdicios de los asturianos se situará en los 33,6 millones. De dividir esa cantidad por el número de hogares que hay, sale un recibo medio de 73,7 euros. Es decir, 55,8 más que el pasado año.

El cálculo que hizo la consejera hace la comparación entre las tarifas de este año y las del que viene, algo que dificulta su seguimiento. Formalmente este curso Cogersa cobra 67 euros por tonelada, al tener que incluir un nuevo impuesto al vertido de desperdicios que es de 40. El Principado, destinatario final de la recaudación de ese gravamen, dijo que lo usaría para compensar a los ayuntamientos vía subvenciones. Lo cierto es que el dinero que les está transfiriendo no cubre al 100% el impuesto, lo que complica saber cuánto le cuesta al final la basura.

A esta indefinición hay que sumar que la mayoría de los ayuntamientos no trasladan al ciudadano todo lo que les cobra Cogersa. La consejera recordó que eso debe cambiar por ley en 2025 cuando «todos» los consistorios deberán cobrar una tasa de basura que cubra al 100% los costes de tratamiento.

Roqueñí apremió además a iniciar «de forma inminente» el diseño de una planta capaz de aprovechar el nuevo combustible de Cogersa, para evitar así tener que pagar hasta 16 millones a otros por consumir el material.

El equipo de gobierno local de Gijón se opone a la subida de tasas y ayer su portavoz, Jesús Martínez Salvador, justificó el porqué: «El Principado ha venido con el problema y no con la solución». La propuesta gijonesa pasa por que el Principado aporte fondos para amortiguar la subida de tarifas o el propio consorcio use sus reservas para ello. «Cogersa es una entidad con muchísimo dinero en su caja de reservas, por lo que creemos que otra forma de gestionar es posible», argumentó Martínez Salvador.