La pobreza aumenta en Asturias y Cáritas alerta: «El escudo social no funciona»

Unos datos que tienen sustento en su Memoria 2023. Durante el año pasado, Cáritas atendió a 12.428 personas y 5.157 hogares. Un 15 y 18% más, respectivamente, que en 2022. «La polarización llegó tras la covid, especialmente entre 2021 y 2022», explicó Pilar Díaz, la responsable del Servicio de Análisis y Estudios de Cáritas. Lo hizo en una rueda de prensa en la sede de la entidad y en la que formaron parte, también, la directora de Cáritas Asturias, Elsa Suárez, y el secretario general, Ramón Méndez-Navia.

Él explicó que «el escudo social no funciona». Y dio varios datos. Por una parte, el funcionamiento de las ayudas a los alimentos, que no tienen la agilidad ni la cobertura necesaria, por otra, el problema de las prestaciones sociales, como el salario social (la ayuda que ofrece desde diciembre de 2005 el Principado a quienes ingresan menos de 465 euros al mes) y el ingreso mínimo vital (la ayuda que implantó el Estado en junio de 2020) «son sus retrasos. Hablamos de demoras de seis meses como mínimo», apuntó Méndez-Navia.

Eso ha llevado a que Cáritas tuviera que incrementar en más de 115.000 euros las ayudas directas el año pasado. «Se proporcionaron ayudas económicas por valor de 1.655.072 euros». Porque el 56% de las familias ayudadas por la entidad viven en hogares «que no cuentan con ningún ingreso» . El 13% viven «de subsidios o jubilaciones»; el 12% «del salario social»; el 11% «del sueldo de algún miembro de la familia, pero que no llega», y el 7% «del ingreso mínimo vital».

Y si las prestaciones tienen retraso, mayor es el de las ayudas a la vivienda. «Las 135 personas que han pasado por los 30 pisos que tiene Cáritas, todas estaban pendiente de una ayuda al alquiler o de una vivienda pública que no llegó». El secretario general de Cáritas fue contundente: «Se está conculcando el derecho a la vivienda», un problema al que no encuentra pronta solución, «porque, la realidad es que no hay vivienda pública en alquiler disponible».

Así, el 38% de las familias que acudieron por primera vez a Cáritas en 2023, «habitaban en viviendas compartidas», tanto con personas de su familia, como en pisos en los que conviven «sin relación de parentesco». Eso lleva a que, además de los 30 pisos, Cáritas haya tenido que atender «en dos recursos alojativos colectivos a 1.550 y a 215 en dos centros para personas sin hogar».

Una pobreza que crece en toda Asturias, pero que tienen focos muy claros de incremento «las zonas urbanas» y, entre ellas, la capital. «Del incremento del 5% de hogares, el 90% son de Oviedo». Por primera vez, «Oviedo se sitúa por delante de Gijón. La explicación que encuentran es que »la población extranjera sin recursos está accediendo a nuestros servicios de acogida parroquiales«.

Y si Oviedo protagoniza el crecimiento de la pobreza, la radiografía de Cáritas revela, también, que ese aumento tiene «rostro de mujer». De los 2.615 hogares a los que atendieron el año pasado, «el 68% el titular es una mujer». Una que no vive sola, «en el 39% de los hogares acompañados viven menores». Así, según resaltó Méndez-Navia, «el rostro de los hogares monoparentales acompañados por Cáritas en 2023 es una mujer, de entre 40 y 44 años, con, la menos, un hijo a su cargo». La procedencia de estas personas son, en su mayoría, otros países. «El 64% de los hogares que acuden a Cáritas son personas migrantes».

También pone el acento Cáritas en el bucle eterno de la pobreza. «El acompañamiento de familias supera los dos años, lo que indica que los mecanismos de protección social no están funcionado como deberian en los hogares más vulnerables». Y no son pocos. El 34% de los hogares, de las familias, que pidieron ayuda a Cáritas «tuvieron acompañamiento desde hace más de dos años».

Un acompañamiento que va más allá del apoyo económico. Señala Cáritas que «en 2023 se acompañó a 412 hogares» sin que mediase prestación económica o de otro tipo. Simplemente «el acompañamiento», ya que además de la pobreza al alza, en Asturias también va a más la soledad no deseada. «Acompañamos a 1.233 personas mayores el año pasado, de ellas, 662 viven en residencias». Recuerdan que en Asturias «hay 58.200 hogares unipersonales en los que vive un mayor de 65 años». De ellos, «el 77% son mujeres». De nuevo, el rostro de la mujer aparece sobre los números de Cáritas.