Puente acelera la mejora de descuentos en el peaje gallego mientras Asturias espera

El titular de Transportes, Óscar Puente, recordó ayer en el Congreso de los Diputados que el esquema en vigor en la AP-9 gallega desde julio de 2021 «no tiene precedentes ni en esta autopista ni en el resto de autopistas». En total se calculaba que la administración central desembolsaría 2.300 millones hasta el final de la concesión, en 2048, para evitar el pago a buena parte de los usuarios. Ese sistema provocaba que para bonificaciones en la AP-9 se destinaran 63,3 millones al año, lo que supone el 59,4% del fondo que tenía el ministerio para financiar descuentos en todas las autopistas.

El régimen gallego incluye una letra pequeña: el dinero que no se consume se redirige a una cuenta de compensación con la concensionaria, de forma que se le da esa parte del presupuesto para contener subidas de tarifa. En el caso de los descuentos de la AP-66, el presupuesto que no se aprovecha para aliviar la carga a los usuarios vuelve al erario, es decir, acaba destinado a otros fines.

Puente anunció ayer que el martes el Consejo de Ministros aprobará la declaración de urgencia para agilizar la mejora de descuentos en la AP-9, lo que implicará una partida adicional de 27,6 millones para mejorar las bonificaciones, elevando así a 82 millones el fondo que consumen las rebajas en esta autopista. El pacto con el BNG suponía que los usuarios más recurrentes pasaran de un descuento actual del 20% sobre la tarifa a otro del 50%.

Por otra parte Puente informó a la Cámara de que el plan de choque activado en julio para atajar las averías del modelo S-106, que opera entre otras en la ruta Asturias-Madrid como AVE y AVLO, ha rebajado a la mitad los problemas. «Tiene una incidencia cada 3.500 kilómetros, cuando antes era cada 7.000», cifró.

Además su departamento adjudicó 12,5 millones para el mantenimiento de 142 kilómetros de la red de carreteras del Estado en Asturias.