Los partidos reclaman una financiación basada en la equidad y que atienda «la singularidad asturiana»

Dicho así todo entraría dentro de la normalidad parlamentaria, si no fuera porque el texto aprobado omite toda alusión al acuerdo suscrito entre el PSOE y ERC, por el que se cede a Cataluña la recaudación del 100% de los impuestos. No hay pronunciamiento alguno a ese acuerdo que permitió la investidura del socialista Salvador Illa como presidente de la Generalitat, lo cual ya de por sí es una contradicción, ya que la derecha utiliza ese acuerdo para arremeter contra el Gobierno al entender que es una prueba más de la «sumisión» del PSOE al independentismo catalán.

También es contradictoria la posición de los partidos de la izquierda, incluido el PSOE asturiano, que no dudan en afirmar que el cupo catalán pone en riesgo el actual modelo de finación basado en la solidaridad entre territorios y que saliendo Cataluña del regimen general de financiación perjudica a Asturias, pero en la declaración que lograron sacar adelante eluden referirse al pacto entre socialistas y Esquerra Republicana por el que, precisamente, se concede a Cataluña ese cupo.

El caso es, que en ese día de contradicciones, los portavoces de los los grupos en la Junta General aprobaron una declaración en la que se reafirman en los criterios sobre financiación autonómica aprobados en 2020 por los partidos asturianos, salvo Vox, en la Junta General. O lo que es lo mismo, PSOE, PP, IU-Convocatoria por Asturies, Foro y la diputada Covadonga Tomé –en el Grupo Mixto tras su expulsión de Podemos– coinciden en la defensa de un sistema de financiación autonómico basado en la equidad territorial, en la que todos los ciudadanos reciban la prestación de servicios en igualdad y que atienda la «singularidad asturiana». Es decir, que en el nuevo modelo se incluyan criterios como envejecimiento, despoblación o dipsersión demográfica para hacer el reparto.

Declaración de Santiago

La declaración aprobada, sólo con el voto en contra de Vox, también pon en valor la Declaración de Santiago, suscrito en 2021 por Asturias, Galicia, Cantabria, Castilla y León, Extremadura, La Rioja, Aragón y Castilla-La Mancha, en la que se defendían los mismos criterios acordados por los partidos asturianos el año anterior.

La Junta de Portavoces había sido convocada a petición del PP. Los populares acudían a la reunión con un texto propio, en el que se planteaba a los grupos un posicionamiento no sólo contrario a la salida de Cataluña del regimen general de financiación autonómica, sino de rechazo a los acuerdos PSOE-ERC. Los partidos de izquierda, PSOE e IU-Convocatoria por Asturias, además de Covadonga Tomé votaron en contra.

Los populares sí votaron, entonces, a favor de la declaración que llevó la izquierda. Y lo hicieron, según el diputado Luis Venta, «por coherencia», puesto que el texto se limitaba a reproducir los criterios ya aprobados por la Junta, con el apoyo del PP, hace cuatro años. La posición adoptada por el principal partido de la oposición no supone que cesen sus críticas al PSOE e IU-Convocatoria por no apoyar la propuesta de declaración planteada por el PP que sí se manifestaba expresamente en contra del acuerdo entre PSC y ERC. «La izquierda en Asturias ya parla catalá: han ratificado el pacto entre el PSOE y ERC para investir a Salvador Illa que supondrá una clara merma de financiación en la sanidad, educación y los servicios sociales y que dinamita el acuerdo alcanzado en la Junta en 2020», afirmó Luis Venta.

Adrián Pumares, portavoz de Foro, considera «insuficiente» la declaración aprobada este 13 de agosto. «Las maniobras de la izquierda asturiana para evitar criticar el pacto PSOE-ERC son indignas y muestran que tenemos un presidente que ha abandonado a los asturianos, lamentó. Sobre por qué, entonces, apoyó la declaración que impulsaron los partidos de la izquierda, Pumares no dio más explicación que «para evitar un vacío en la Junta de Portavoces». También aprovechó para recriminar a Barbón «que haya humillado a todos los asturianos aplaudiendo ese pacto entusiasmado en Barcelona», en alusión a la presencia del presidente del Principado el pasado sábado en el acto de toma de posesión de Salvador Illa como presidente de la Generalitat.

El PSOE defiende su posición

Si a los partidos de la derecha asturiana les costó explicar su apoyo a la declaración que salió adelante en la Junta de Portavoces, a los que forman el bloque de izquierdas, también. La portavoz del PSOE, Dolores Carcedo, fue preguntada por las razones de que no se incluyera un rechazo expreso al acuerdo entre PSC y ERC, que habla de bilateralidad y de una financiación diferenciada. Su respuesta fue: «Consideramos que la mejor forma es decir claramente cuál es nuestro posicionamiento en materia de financiación autonómica, es lo que tenemos que hacer desde Asturias», ha respondido.

Carcedo aprovechó para arremeter contra la «estrategia» del PP, porque su intención «no es defender los intereses asturianos, sino desgastar a gobiernos progresistas».

Más claros sobre esa ausencia de alusiones al pacto PSOE-ERC en la declaración aprobada fueron Xabel Vegas, portavoz de Convocatoria por Asturies, y Covadonga Tomé. «Sería un poco extraño que en una Cámara Autonómica, en este caso asturiana, hiciéramos una valoración sobre acuerdos que llegan formaciones de otra comunidad autónoma», dijo el primero, razonamiento que compartió la diputada del Grupo Mixto.

Donde no hubo contradicciones fue en Vox. «Sólo nosotros planteamos una alternativa distinta y que pasa por devolver las competencias al Estado. Es la única forma de garantizar unos servicios públicos de calidad y similares en todas las regiones de España», dijo Carolina López, portavoz de esta formación.