Parte de la red ferroviaria, sin trenes por los árboles caídos en las vías

El vendaval de la noche tumbó también decenas de árboles en los márgenes de las vías ferroviarias, impidiendo la circulación en algunos puntos o afectando directamente a la catenaria en otros. A las 12.30 horas, tras una mañana de intenso trabajo, quedaban dos cortes de vía que obligaban a transbordar a los pasajeros por carretera: entre Pravia y Avilés, y entre Arriondas y Ribadesella.

Son los últimos frentes tras una jornada difícil para los operarios de mantenimiento de vías y catenaria. A través de su canal oficial, Adif comunicó a las 8 de la mañana que la circulación entre Nava e Infiesto estaba suspendida por los daños causados a la línea área de contacto por la caída de un árbol. A las 9.40 añadía que la vía estaba impracticable entre Arriondas y Ribadesella por falta de tensión en la catenaria también por el desplome de un árbol, esta vez entre Toraño y Llovio. Para minimizar las molestias, estaba previsto el transbordo por carretera, en autobuses o taxis, entre Infiesto y Ribadesella.

Las afecciones por caída de árboles se han reproducido también en otros puntos de la red, como Grado y Muros de Nalón, pero son problemas que los operarios de Adif están resolviendo sobre la marcha, según apuntan fuentes ferroviarias.

La abundante vegetación en los márgenes de las vías supone uno de los problemas frecuentes del ancho métrico, que lleva años sin lanzar una profunda operación de retirada de árboles, según confirman los trabajadores. El plan de choque anunciado por el Ministerio de Fomento y el Principado incluye precisamente una actuación en este sentido, reconociendo que hay puntos donde se ha dejado crecer tanto a los árboles que complican la visibilidad de los conductores.