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G. POMARADA
SARDÉU (RIBADESELLA).
Domingo, 21 de febrero 2021, 01:15
Tareas cotidianas como hacer la colada, asearse o beber un vaso de agua suponen un quebradero de cabeza en el pueblo riosellano de Sardéu. «Está abandonado, ni se puede beber, ni lavar, ni hacer la comida. Tenemos que comprar el agua por lo turbia ... que sale», denuncian vecinos de la localidad. La problemática afecta también a negocios locales como alojamientos turísticos y una lavandería.
Ante esa situación, el PP anunció ayer que presentará una proposición no de ley en la Junta General para instar al Principado «a que haga cumplir las obligaciones del Ayuntamiento de Ribadesella y, de no ser así, que la propia Administración autonómica intervenga» . «No se puede estar en el siglo XXI con la incertidumbre de no tener abastecimiento de agua potable. Es un motivo para no querer venir a los pueblos», denunció Javier Brea, diputado por el Oriente. Indicó además que las carencias las «vienen arrastrando desde hace años». Según apuntan en el propio pueblo, los problemas eran antes intermitentes, pero en los últimos cuatro meses la turbidez del agua es constante. «Es impracticable debido a los manantiales que tienen en Sardéu, la filtración es a través de arena de sílice. Esos sedimentos van al depósito del pueblo y se disparan a las viviendas. El Ayuntamiento no hace nada por solucionarlo y es sencillo, bombear el agua desde Calabrez para que esté limpia y potable», indicó el concejal Paulo García.
Esa propuesta es rechazada por el momento por el Consistorio, que apuntó como motivo a un derrumbe que afecta a la tubería entre la estación de bombeo y el depósito de la localidad de Calabrez.
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