Rescate de montaña

Deshidratados y con hipotermia: así hallaron a dos montañeros tras dos días perdidos en los Picos

A las 20.20 horas del pasado día 28, la Guardia Civil supo de la existencia de una pareja extraviada en los Picos. La pareja había salido por la mañana desde Vega de Urriellu hacia el refugio de Cabrones. El cambio en la meteorología hizo que en un momento determinado no fueran capaces de continuar, aprovechando una zona de cobertura telefónica a mitad de camino, en la zona de Horcada Arenera, para pedir ayuda. Las condiciones eran adversas, con niebla, viento y lluvia, y la proximidad del ocaso hizo a los agentes del Greim de Cangas de Onís plantearse un rescate a pie tras algún intento infructuoso de localización por parte de los guardas de los refugios de Urriellu y Cabrones.

Sobre las 4 de la madrugada, tras recorrer el tramo previsto por los montañeros, desde Collado Pandébano hasta el refugio de Cabrones pasando por el refugio de Urriellu, no vieron señal alguna de estas personas y decidieron pernoctar en el refugio de Cabrones a la espera de la luz de la mañana.

A primera hora del día siguiente, se reanudó la búsqueda en coordinación con un grupo guiado que iba a realizar la misma ruta entre Urriellu y Cabrones, siendo ellos quienes los encontraron a unos 20 minutos del refugio. Su estado físico, sobre todo el de la mujer, que presentaba síntomas de hipotermia, deshidratación y poca movilidad por las caídas sufridas, hicieron valorar a los rescatadores su traslado hasta el refugio de Cabrones, donde se decidió, tras aportarle los primeros auxilios necesarios para recuperarse de la hipotermia y deshidratación, que permaneciesen hasta que fuera viable un rescate por aire, ya que su estado no hacía recomendable su evacuación a pie.

Durante todo la jornada del martes fue imposible la evacuación aérea debido al mal tiempo. Fue finalmente este miércoles cuando se pudo proceder a la evacuación de los dos afectados en el helicóptero de la Guardia Civil de Asturias. La mujer fue trasladada hasta el Hospital de Arriondas por su extrema debilidad y dolores articulares. El hombre fue trasladado hasta Pandébano, donde tenía su vehículo estacionado.