Un queso de Cabrales de récord Guinness: 36.000 euros

La sorpresa inicial y alguna que otra cara de susto precedieron al estallido de aplausos porque el mejor queso del 52 Certamen de Cabrales se subastó por la friolera de 36.000 euros. Había entre el público quien no se lo podía creer y empezó a morderse las uñas mucho antes de que la puja llegara a su culmen. Pero también había entre el numeroso público quienes decían aquello de 'ya sabía que sería él'. Porque volvió a ser el hostelero Iván Suárez, del Llagar de Colloto, quien se hizo con el mejor queso del certamen celebrado en Arenas.

Es la quinta vez que lo compra –consecutivas si se tiene en cuenta que en 2020 y 2021 no hubo subasta a causa de la pandemia– y la cuarta que, por hacerlo, logra un Guinness World Record. Para lograrlo, Suárez desembolsó 14.300 euros en 2018 (primer récord), 20.500 euros en 2019 (segundo), 17.000 euros en 2022 y 30.000 euros el año pasado. Esta era el Guinness World Record vigente, el que figuraba en la publicación mundial y que ahora tendrá que actualizarse hasta los 36.000 euros desembolsados por el queso más caro del mundo en subasta.

«No sé hasta dónde pensarán llegar porque si cada año lo suben tanto... Pero que pase es muy bueno para todos los que estamos aquí», celebró la quesera Encarnación Bada. El suyo volvió a ser el mejor queso del certamen, un hito que ya había conseguido en 2012 y 2013. «Lo veía ganador, muchos me lo decían, porque era muy suave y cremoso. Pero tampoco lo tenía seguro porque ahora todos hacen muy buen queso aquí», aseguró la elaboradora de la quesería Ángel Díaz Herrero, de Tielve. Dicho y hecho. Consiguió el primer premio por una pieza de 2,3 kilos, aproximadamente, elaborada con leche de vaca a primeros de diciembre. «Lo llevamos a la cueva de Los Mazos, en Peña Maín, a 1.500 metros. Y lo llevamos andando, una hora de subida por un camino nada sencillo al que no llegan los coches», defiende la quesera, al tiempo que pone en valor «la importancia de las cuevas de maduración».

El segundo mejor queso fue el Valfríu y el tercero el de Maín. Y los premios al mejor lote fueron a parar a la quesería Valfríu, que se alzó con el primer puesto por tercer año consecutivo; la de Ángel Díaz Herrero, que logró el segundo, y Maín, que se alzó con el tercero.

La subasta contó con un precio de salida de 3.000 euros y la participación de nueve establecimientos hosteleros de toda España: La Montera Picona de Ramón (Gijón), Comidas Naón (Viella, Siero), Sidrería Román (Gijón), Carlos Tartiere (Madrid), El Dólar (Oviedo), Lo de Viole (Madrid), Sidrería La Cuenca (Madrid), el Camping Las Gaviotas (Castrillón) y el propio Llagar de Colloto.

«Todos los años vengo con la ilusión de vivir el momento, pero tengo muy claro, como todos los que estamos ahí, que si la puja no supera el récord pierde un gran porcentaje de gracia. Por eso pago estos precios, porque la repercusión solo se alcanza de esta forma», aseguró el hostelero, que celebró el premio con «todos los que hacen que yo pueda estar aquí sonriendo en la foto», empezando por sus padres y continuando con el resto de la familia y el equipo.

Por tercer año consecutivo se donará un 15% del monto total a la Asociación Galbán. Lo que va a hacer con el queso aún no lo tiene decidido. El día 2 es mi cumpleaños, así que ese día lo degustaré con la familia y amigos y, a partir de ahí, con los clientes».

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