El Principado y Ribadesella buscarán juntos soluciones a la contaminación de Santa Marina

Aún sin fecha, la primera reunión permitirá a las representantes de las administraciones abordar la problemática y, en sucesivas reuniones de ese grupo, serán los técnicos de ambas quienes continúen ahondando en la búsqueda de soluciones. Será, destacó el alcalde de Ribadesella, un trabajo «conjunto» que persigue el fin último de acordar una «decisión definitiva» y «evitar que vuelva a pasar». «Sabemos los problemas que hay, el tema de alivios y fisuras y algún vertido concreto», expuso García. Por parte del Ayuntamiento, abundó, ya han comenzado a abordar «algún vertido». El cierre al baño de la playa de Santa Marina es una cuestión «complicada» y que «preocupa» al primer edil. En su primer verano en el cargo, los episodios de contaminación obligaron a tomar esa medida de prohibición entre el 22 y el 27 de junio y entre el 31 de agosto y el 5 de septiembre. En anteriores temporadas, la misma situación se había registrado en otras dos ocasiones: a finales de agosto de 2020 y a principios de septiembre de 2022. Hasta la fecha, los episodios de contaminación se han sucedido sin soluciones efectivas. Entre las posibles causas aludidas durante años por las administraciones figuran desde la falta de saneamiento en pueblos del concejo a las infiltraciones de agua salada en la red.

Para el alcalde, resulta «primordial» que el problema se aborde junto al Principado, pues «sin ellos es imposible».

En el encuento de ayer, el primer edil y la consejera de Transición Ecológica trataron también el estado de las obras de saneamiento del río San Miguel, iniciadas el pasado mes de abril con una inversión de 1,7 millones y que desde entonces marchan «a buen ritmo». García recordó asimismo las zonas del concejo en las que «quedan por hacer» las obras de saneamiento, como la zona oriental.