Decía Joaquín Sabina aquello de que 'más raro fue aquel verano que no paró de nevar', y desde la primera vez que aquella canción sonó en los transistores españoles, pocas veces, la verdad, se ha visto nieve en verano, al menos en Asturias. Pero la pasada noche sí, la bajada de temperaturas que fue notable el jueves hasta a nivel del mar respecto al día anterior hizo que en las cumbres de los Picos de Europa se alcanzasen incluso temperaturas por debajo de los cero grados.
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Esto, añadido a que se dieron ligeras precipitaciones, hizo que aproximadamente a partir de los 2.000 metros de altitud hubiese nevadas, que si bien fueron de escasa entidad, sí que permitieron al guarda Jorge González Bada, del refugio del Jou de los Cabrones (situado a 2.034 metros de altitud), pudiese captar copos de nieve cayendo en los picos en pleno verano y «una capa que llegó a cuajar, de apenas un centímetro y que ya se ha fundido», pero que dio pie a pensar en otras estaciones del año a quienes disfrutan estos días de la montaña en esa zona.
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Este fin de semana y el lunes, por otra parte, las previsiones de la AEMET indican que el tiempo mejorará ligeramente en cuanto a temperaturas, pero con probables precipitaciones de cierta entidad que se irán desplazando de occidente a oriente. Así que si quiere usted disfrutar de las muy variadas actividades vinculadas a la festividad del Día de Asturias, no se olvide el chubasquero o el paraguas.
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