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LAURA FIDALGO
COLOMBRES.
Viernes, 24 de diciembre 2021, 01:11
«En un sueño». Así se siente Jesús Bordás, alcalde de Ribadedeva, desde que conoció la noticia de que la Feria de Indianos, que ya lleva trece años celebrándose en el concejo, pasaba a ser considerada, por su tradición cultural, Fiesta de Interés Turístico Regional.
Se trata de un encuentro que se festeja el segundo fin de semana de julio con diferentes actividades lúdicas, culturales y gastronómicas para unir Asturias y América, pues su objetivo principal, según indica el regidor, es «ensalzar y reivindicar la figura del emigrante para que no quede en el olvido, pues antiguamente la emigración era sinónimo de valentía y supervivencia».
Así es que «Ribadedeva siempre ha sido considerada la capital de la emigración. Así es como queremos que nos conozcan en todo el mundo -añade el primer edil-, porque estamos muy arraigados a dicha figura».
El alcalde de Ribadedeva reconoce que el éxito de la Feria de Indianos siempre ha sido «rotundo», pero, a su vez, tiene claro que este reconocimiento será un impulso que facilitará la comunicación y la imagen de la fiesta. Asimismo, asegura que ahora no hay tiempo para descansar y relajarse, ya que «esto conlleva una gran responsabilidad», pues tiene claro que «ahora toca impulsar y proteger más que nunca nuestra Feria, porque si no, todo el camino recorrido habrá sido en vano».
Por esta razón, Bordás afirma que ya tiene varias ideas en mente para la feria del año que viene: «Una de las novedades más especiales es la idea de desarrollar un mural, creado por el ilustrador asturiano Alfonso Zapico, que se repartirá por todos los rincones de Colombres y se representará en él los distintos estados de la emigración; la partida, el viaje, la llegada, el retorno...».
Por otro lado, también se está llevando a cabo un censo de emigración, donde se recapitularán los datos de quienes algún día se tuvieron que ir: «Es un trabajo que requiere mucho esfuerzo y colaboración por parte de todos». «En Ribadedeva no hay ni una sola familia que no tenga o haya tenido un familiar emigrante», expone el alcalde, entre los que se incluye, pues el hermano de su abuela tuvo que emigrar cuando era muy joven a México, donde finalmente se casó y creó una familia.
«Sabemos de primera mano lo que realmente significa la emigración porque nuestros padres y abuelos nos lo han contado, así que, aunque no o hayamos vivido, lo llevamos en nuestro ADN», apunta.
Además, Bordás destaca que el objetivo de la Feria de Indianos también tiene un propósito educativo y cultural, pues «hay que enseñar a las nuevas generaciones estos valores. La emigración nunca dejó de ser una realidad y mucho menos en el pasado». De esta manera, tratan de dar a conocer esa verdad que el alcalde define como «fabulosa a la par que terrible. No hay nada peor que dejar atrás a tu familia y a tu tierra natal , pero a la vez se iban con toda la esperanza puesta en un futuro lleno de nuevas oportunidades». A propósito de esto, Bordás asegura que «hoy en día nos falta iniciativa, nos creemos invencibles por cuatro tonterías, pero la verdadera valentía es irte de tu casa con una mano delante y otra detrás».
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