Investigados por la muerte de un perro al que dejaron encerrado en un coche en Parres

La Guardia Civil investiga a tres personas como supuestos autores de un delito de maltrato animal por dejar dos perros encerrados en un vehículo mientras coimían en un establecimiento de Parres. Finalmente, uno de los animales terminó falleciendo a causa de un golpe de calor.

Los hechos sucedieron el pasado 4 de septiembre, cuando la Guardia Civil recibía un aviso por la existencia dos perros en el interior de un vehículo estacionado en la localidad de Parres, en mal estado. La llamada fue realizada por dos Guardias Civiles de Ávila que estaban de vacaciones en Asturias. Tras haber comido en un restaurante de la zona, se desplazaron hasta el parking donde tenían estacionado su vehículo, pudiendo observar que en interior de un turismo cercano al suyo había dos perros que debido al calor existente parecía estar asfixiándose.

Tras realizar gestiones para localizar a sus dueños, hallaron comiendo en el restaurante a los propietarios del vehículo donde estaban los animales. Tardando más de 15 minutos en salir para asistirlos.

Ante la situación, testigos de los hechos, viendo el estado en el que se encontraban los perros, dieron aviso a un veterinario, quien a su llegada atendió a uno de ellos, salvándole la vida, no pudiendo hacer nada por el otro, que ya había fallecido cuando llegó.

La falta de diligencia y atención de los perros, dos yorkshires, dejándolos en el interior del vehículo estacionado un día de altas temperaturas, hizo que los dos perros sufrieran un golpe de calor, a raíz de lo cual falleció uno de ellos, hecho que motivó la intervención de la Guardia Civil de Gijón, procediendo a la toma de manifestación en calidad de investigados de su propietaria y cuidadores como supuestos autores de un delito de maltrato animal.

Hay que tener en cuenta, que la temperatura que puede llegar a alcanzar en el interior de los vehículos en días de calor, se eleva de manera considerable. Se estima que con 30 grados en el exterior y transcurridos 30 minutos, la temperatura interior puede subir a los 49 grados, siendo muy peligroso dejar los animales dentro.

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