«La campaña de la xarda es una ruina»

En la campaña de la xarda tenían depositadas sus esperanzas los pescadores del Oriente tras un año marcado por el impacto de la pandemia. Sin embargo, las capturas en estas primeras semanas están resultando una «ruina», sin que las cofradías encuentren explicación a ese descenso. «Esto nunca se vio, no hubo un día de pescar bien. Si antes salían tres o cuatro camiones, ahora es uno», indica el secretario de la Cofradía Santa María de Sábada de Lastres, Carlos Manso. En el puerto llastrín, que el pasado año concentró el 65% de las capturas de todo el Oriente, operan ahora 45 barcos, cuyos marineros «se desesperan y están con un pesimismo enorme», apunta Manso. «Para Lastres esta costera es vital y está siendo duro y preocupante. Esperemos que en estas dos semanas mejore la cosa», confía.

Mismo diagnóstico ofrecen en Llanes, donde «hay muy poca cosa y no sabemos qué está pasando», indica el patrón mayor de la Cofradía Santa Ana, Ángel Batalla. En el puerto llanisco se concentran una veintena de barcos, tantos asturianos como gallegos, que en los mejores días alcanzaron los dos mil kilos. «Son los que menos», dice Batalla. Para el patrón mayor, una posible explicación se encuentra en la pesca de arrastre de los países nórdicos. «Para la pesca artesanal no llega y además nos tratan de quitar de en medio con leyes absurdas», denuncia en relación a la normativa de la Unión Europea, que contempla por ejemplo la instalación de cámaras de videovigilancia. En Ribadesella, el secretario de la Cofradía Virgen de la Guía, José Manuel Gutiérrez, coincide en que la temporada es «de momento floja». «Hay años buenos y años malos, igual viene más tarde y en una semana están que nos comen», confía. Por el momento, esta semana han registrado jornadas de «12 barcos y 500 kilos, una ruina total».

La misma situación se repite en Bustio, donde han vivido días de apenas «veinte o treinta cajas». «No hay nada, no se lo explica nadie. Está siendo una costera rara y mala», explica el patrón mayor, Jesús Peñil. Ayer a las once de la mañana los pescadores «ya estaban en casa», mientras que otras embarcaciones de mayor tamaño optaron por desplazarse «hacia el este, hacia Santander», señala. «No sé si seremos a acabar el cupo», teme Peñil.

Ese cupo ya había sido denunciado como escaso por los pescadores asturianos al inicio de la campaña, ya que entienden que el reparto es desigual por comunidades y beneficia principalmente al País Vasco. El pasado año, las capturas de xarda en los cuatro puertos orientales se situaron en los 1.453.197 kilos, lo que se tradujo a nivel económico en 1.233.850 euros.