«En autobús se va mejor, antes había atascos porque la gente le tenía miedo a las vacas»

En esta ocasión, además, se adelanta media hora, a las 7.30, el inicio de la regulación en los Lagos de Covadonga. Y menos de los esperados fueron quienes ayer optaron por ir tanto a los Lagos de Covadonga como a la ruta del Cares, en el Parque Nacional de los Picos de Europa. La preocupación que generaron los incendios estuvo entre la causas y también, indicaban en el sector turístico, que todavía eran muchos los visitantes que recalaban ayer en el Principado para iniciar sus vacaciones de Semana Santa.

Llegaron eso sí, al espacio protegido, desde todos los puntos de España. Madrileños, catalanes, sorianos, vallisoletanos... Y en general estaban de acuerdo con la regulación de los accesos, que casi todos ya conocían. Algunos incluso repetían en uno de los autobuses que ascienden por la serpenteante CO-4 hasta los Lagos de Covadonga. La seguridad que implica usar este sistema diseñado por el Principado se apuntaba como la mayor ventaja.

No en vano, parte de quienes ayer subieron a esta zona, ya lo habían hecho hace unos cuantos años, cuando todavía lo habitual era ver la carretera repleta de coches, en ocasiones esquivando vacas, haciendo frente a la niebla y cruzándose con otros coches y autobuses.

«En autobús se va mejor, antes había atascos porque la gente le tenía miedo a las vacas», decía un grupo de catalanes que se conocía a la perfección la zona. «Se te calentaba el coche y... se liaba cada una», contaban.

Fue precisamente para evitar los cruces entre vehículos en el tramo de trece kilómetros que separa Covadonga del aparcamiento de Buferrera el motivo de establecer la prohibición del paso de vehículos particulares.

«Nos hemos arreglado muy bien con el autobús, dejamos el coche en la basílica, lo cogimos y todo bien, tienen los tiempos muy bien controlados», explicaba una pareja llegada de Valladolid, que apuntaba: «Lo único que tienes que pagar».

A las tarifas se refería también el grupo de catalanes. «Solo hay una tarifa de adultos y otra para niños menores de doce años, no estaría mal que hubiera más variedad...», decían. Eso sí, reconocían que por lo demás «todo está bien». «La frecuencia de los autobuses nos ha parecido perfecta y el personal es muy simpático», indicaron mientras otra de los integrantes de este grupo remataba: «Y el del autobús era muy buen conductor».

Se calcula que ayer usaron el sistema de autobuses unas quinientas personas. «A medio gas» empezó también la nueva campaña en Cabrales. «Hubo poca gente», confirmaron en el sector turísticos de la zona, que no obstante matizó que durante la jornada de ayer se fueron llenando los hoteles. Quienes vayan a esta zona tendrán que tener en cuenta que se regulará además el entorno de la collada de Pandébano, un lugar de referencia para los montañeros, para evitar que se aparque fuera de las zonas habilitadas a tal fin.