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Comienza uno de los juicios más esperados de la región. Esta mañana, en torno a las diez, arrancaba en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Oviedo la selección del jurado que deberá dilucidar si los cuatro acusados por el asesinato del concejal llanisco Javier Ardines son o no culpables. Los primeros en llegar a sede judicial eran los abogados de la defensa. Javier Beramendi que defiende al presunto inductor del crimen, Pedro Nieva; Luis Mendiguren lleva al considerado intermediario, Jesús Muguruza y Adrián Fernández y Fernando Barutell representan a los dos supuestos sicarios, Djilali Benatia y Maamar Kelli. Finalmente, minutos antes de las diez llegaba Antonio Pineda, quien se encarga de la acusación particular que ejerce la familia del concejal.
Los cuatro acusados, por su parte, fueron trasladados a primera hora de la mañana desde la cárcel de Asturias a los calabozos de la Audiencia, donde continúan, según indicó Barutell. Este, a su entrada a sede judicial aseveró que tanto él como sus compañeros tratarán de defender «hasta el final» la inocencia de sus clientes y, en lo que respecta a Kelli, apuntó que será la acusación quien tenga que demostrar su presencia en Llanes en la madrugada del crimen.
Durante el verano ya fueron preseleccionadas veinticuatro personas que hoy comparecen en la Sección Segunda para que las partes elijan entre ellas a las nueve que formarán parte del jurado popular, más dos suplentes.
Tras este primer trámite, está previsto que el juicio arranque por fin el próximo martes, a las diez de la mañana, con una vista en la que los abogados plantearán una serie de cuestiones previas que se deberán dilucidar antes de que llegue el turno de la declaración de los cuatro acusados. Las sesiones se alargarán durante todo el mes de noviembre y será en diciembre cuando haya un veredicto.
Pasada la una de la tarde de este viernes quedaba conformado, en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Oviedo, el jurado popular del conocido cómo 'caso Ardines'. Según indicaron los letrados a su salida de la sede judicial, se trata de cinco hombres y cuatro mujeres, más dos suplentes. De entre las veinticuatro personas preseleccionadas inicialmente las partes fueron recusando varias hasta quedarse con el grupo final. Los abogados de las defensas manifestaron asimismo su confianza en que sus clientes sean absueltos, pues consideran que la acusación no podrá probar su culpabilidad en el brutal asesinato de Javier Ardines. «Todo se verá a partir del martes», apuntaron.
El letrado de la familia del concejal, Antonio Pineda, por su parte, abandonaba en torno a la una y media la Audiencia rehusando hacer declaraciones, cómo viene sucediendo desde los primeros días del proceso.
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