Porrúa despide al cura Francisco Panizo tras trece años de dedicación a la parroquia

Durante estas semanas se están sucediendo los homenajes y muestras de agradecimiento al sacerdote Francisco Panizo, que el 1 de septiembre dejará las parroquias de Poo, Barro, Porrúa y Parres, en Llanes, para hacerse cargo de las avilesinas de San Cristóbal, Miranda y Raíces-La Maruca, tal y como decidió el Arzobispado de Oviedo.

Pero son muchos los feligreses que quieren agradecer a Panizo los años de dedicación a estas localidades. Prueba de ello es la recogida de firmas que iniciaron varios vecinos para constatar su desacuerdo con esta decisión. Y además se están realizando actos en las diferentes localidades de las que ha sido sacerdote para despedirle.

Ayer fue el turno de Porrúa, donde cerca de un centenar de vecinos, muchos de ellos niños, quisieron agradecerle los trece años de dedicación que ha tenido para con esta parroquia. Lo hicieron con una espicha tras la celebración de una misa por los difuntos de la localidad. También se le hizo entrega a Panizo de una placa con la que se quiere mostrar la satisfacción de los lugareños con la labor sacerdotal que ha realizado este cura durante más de una década en Porrúa.

«Muy querido»

Pero el de ayer no va a ser el único homenaje que va a recibir el sacerdote esta misma semana. Para este domingo se prepara un gran acto de despedida en Barro al que están convocados los feligreses de las cuatro parroquias que ha atendido Panizo en Llanes. Será tras la misa de las 13 horas y los organizadores invitan a todos los vecinos que quieran asistir a que aporten algo de comida y bebida para colaborar en el pincheo que se va a celebrar.

La previsión es que acudan cientos de feligreses a despedir a quien ha sido para ellos «un cura muy querido».