Caravia da nombre a sus calles

El Ayuntamiento de Caravia lleva más de un año trabajando en la elaboración de un nuevo callejero del concejo, un documento que viene a sustituir al elaborado en los años 80 y que pretende dar solución a una carencia que afecta a este municipio: la dificultad que experimentan las personas de fuera para localizar uno u otro inmueble situado en este territorio. Y es que los vecinos siempre se han orientado denominando a los lugares con los nombres comunes de la zona, pero los foráneos andaban perdidos. Las denominaciones tradicionales se mantienen, pero ahora pasan a ser la forma con la que se llaman cada uno de los barrios.

Con el crecimiento del número de viviendas en Caravia, muchas de ellas de segunda residencia, este problema ha ido a más y eran frecuentes situaciones en las que las empresas de mensajería acababan dejando el paquete enviado para una persona en otra vivienda diferente al no encontrar su lugar de destino.

El nuevo callejero de Caravia fue aprobado de forma inicial por el Pleno del Ayuntamiento hace unas jornadas y en estos momentos se encuentra en fase de exposición pública. El documento ha otorgado nombres a 83 calles. Otro aspecto muy importante es que por primera vez se da un número identificativo a cada una de las viviendas del concejo. Lo que apenas se utilizan en el nuevo callejero son nombres de personas para identificar a las vías. Sólo hay dos excepciones, la del investigador, escritor y folclorista Aurelio del Llano y la de la escritora y maestra María Balbín, ambos naturales del concejo y fallecidos en 1936 y 1961 respectivamente. El nombre del primero se le pondrá a la calle que vas desde el Ayuntamiento hasta la intersección con la carretera de Morís, justo de la iglesia. El nombre de la literata se le ha dado al parque de Prado.

El resto de las calles tienen nombres como La Arena, El Visu, La Cabra, El Pedrosu, La Casona, Pozu les Pipes, La Cantera, El Cueto Norte y el Cueto Sur, La Medina o Les Quintanes, por sólo citar algunas de las 83 nuevas denominaciones.

«Intentamos dar los nombres lo más próximos posibles a como se conocía la zona o de lugares cercanos. También hemos utilizado la toponímia de Caravia. Hemos mantenido también las denominaciones de los barrios y de los núcleos del concejo. Ahora nos queda para más adelante, una vez aprobado definitivamente el callejero, poner los carteles con los nombres de las calles y los números en las casas», explica la alcaldesa, la popular Salomé Samartino, quien avanza que las nuevas placas que identifiquen las calles «serán dignas».

Carta y mapa a los vecinos

El crecimiento del número de inmuebles en Caravia, impulsado por el aumento de la segunda vivienda, es lo que ha llevado al Consistorio a acometer esta labor de dar un nuevo callejero al concejo. «Antes nos conocíamos todos, pero ahora con la segunda vivienda hay casos en los que no conoces a los vecinos y al no tener números las casas a los carteros y servicios de emergencias, como las ambulancias, también les costaba encontrar las viviendas. Con el nuevo callejero queremos solucionar este problema», indica la alcaldesa.

Para que los vecinos se familiaricen con las nuevas denominaciones el Consistorio les va a remitir una carta a cada uno de ellos en la que se indica la nueva denominación de la calle donde está asentada su vivienda, el número que se le ha dado a ésta y también un plano del entorno del inmueble con los nombres de las calles próximas.

Los lugareños tendrán un plazo para analizar eldocumento y realizar propuestas si entienden que las denominaciones otorgadas por el Ayuntamiento no son las adecuadas o se pueden mejorar.