enrique carballeira
Martes, 9 de diciembre 2014, 01:20
La aparición en Infiesto de varias pintadas, algunas con carácter amenazante, ha levantado una ola de indignación en el concejo y ha disparado las especulaciones acerca de su posible autoría. La actuación de los vándalos que se han entretenido en llevar adelante este ataque incívico tuvo lugar durante la madrugada de este lunes. Uno de los edificios afectados, sobre todo por su antigüedad y representación, ha sido el de la iglesia parroquial, que apareció con diferentes alusiones contra el estamento eclesiástico, en forma de pintadas realizadas en un tono rojo chillón. Frases como «católica, pederasta y represora» o «Dios es fascista» se podían leer en la fachada del centenario templo piloñés.
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El párroco de Infiesto, Manuel García Velasco, 'Lito', se mostraba ayer indignado por estos hechos, especialmente, «porque atacan a la Iglesia pero también a un edificio emblemático, patrimonio de todos los piloñeses». En el día de hoy, 'Lito' tenía previsto acercarse a presentar la correspondiente denuncia ante la Guardia Civil, para que se trate de dar con el responsable, «o los responsables» de estos hechos. Como es lógico, el responsable de la parroquia piloñesa señaló su intención de proceder a contratar la limpieza de las pintadas cuanto antes, para evitar que sigan ensuciando la imagen de una iglesia que ha sido sometida a distintas mejoras en los últimos años. García Velasco también dijo ayer que esta semana había recibido la visita de dos personas que se habían dirigido a él con malos modos, y que exigían quedarse en su casa, afirmando que esa era «la casa de todos».
Las pintadas también atacaron a colectivos políticos, como el partido Unión Piloñesa (Upil). En otro edificio de la zona se podían leer frases como «Upil fascistes», acompañada del dibujo de la hoz y el martillo.
Además, tampoco faltaron sentencias inquietantes y amenazantes, que personalizaban su diana en el vicepresidente de Upil, el abogado, José Enrique Carrero-Blanco: «Carrero volarás como tu güelu». Unos metros más abajo, en esa misma calle, aparece otra referencia al político de Upil o bien a su abuelo: «Carrero al infiernu, Argala al cielu». En este caso parece claro que la pintada hace referencia a José Miguel Beñarán Ordeñana, alias Argala, miembro de ETA y uno de los ideólogos marxista-leninistas más destacados de esta organización terrorista, durante el franquismo y la transición española. Se le considera uno de los participantes en la llamada 'Operación Ogro', en la que se asesinó al almirante Luis Carrero Blanco, al poco de producirse su nombramiento como Presidente del Gobierno, en 1978. Argala murió a su vez asesinado el 21 de diciembre de 1978 por una bomba colocada bajo su coche en Anglet (País Vasco francés) en respuesta al asesinato de Carrero Blanco y que fue reivindicado por la organización terrorista de ultraderecha Batallón Vasco Español.
En el caso de esta pintada, los autores podrían haber incurrido incluso en el delito de enaltecimiento del terrorismo. En otros edificios de la capital piloñesa, como la Obra Pía, también se reflejan sentencias como «contra el paro y la corrupción el spray pasa a la acción». El grupo de Unión Piloñesa hizo público ayer un comunicado en relación a estos hechos, manifestando su «repulsa a todas ellas, en especial a las que han aparecido en la iglesia de Piloña».
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En su escrito, los responsables de este nuevo partido piloñés recuerdan que «el fascismo es una ideología y un movimiento cuyo proyecto político es instaurar un corporativismo estatal totalitario y una economía dirigista, mientras su base intelectual plantea la sumisión de la razón a la voluntad y la acción, aplicando un nacionalismo fuertemente identitario con componentes victimistas o revanchistas, lo que conduce a la violencia».
Unión Piloñesa recuerda además que su objetivo es «denunciar presuntas corrupciones que ha habido en nuestro concejo; hacer propuestas para la mejora de Piloña; realizar todas las solicitudes por registro para su debate y valoración; mociones participativas para que el vecino vea nuestras propuestas; decir lo que pensamos con la libertad de expresión dando la cara siempre, sin ocultarnos en la noche ni en el anonimato».
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Por esta razón, desde Upil se preguntan si sus acciones hasta la fecha, «¿se parecen algo a la definición de fascista?», a la vez que recuerdan que «la democracia es una forma de organización del Estado en la cual las decisiones colectivas son adoptadas por el pueblo mediante mecanismos de participación directa o indirecta que confieren legitimidad a sus representantes».
«Unión Piloñesa con sus hechos demuestra que está con la democracia y con los demócratas, utilizando los medios democráticos interponiendo la pertinente denuncia en el cuartel de la Guardia Civil para que estos cobardes respondan de sus actos», concluyen.
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