Tres zonas de trabajo y diferentes ritmos en cada una

TERRY BASTERRA

Sábado, 15 de noviembre 2014, 00:13

Las obras del La Franca-Unquera tiene tres zonas claramente diferenciadas, tanto por la orografía del terreno donde se están desarrollando, como por el estado de ejecución que presentan o el ritmo de las labores en ellas.

Publicidad

El lugar donde los trabajos evidencian un mayor avance es en los dos extremos del tramo. Este es el caso del trazado entre La Franca y el falso túnel de El Peral. Allí ya se han aplicado varias capas de asfalto al firme y las tareas de construcción se ve que podrían desarrollarse a un ritmo mayor, pero se está a la espera de que avance la obra en otra parte del tajo.

Algo más retrasadas, aunque también bastante ejecutadas, van las labores de construcción en el otro extremo de estos 4,5 kilómetros, concretamente en la zona de Unquera y Bustio. Allí se ha construido ya la caja de la A-8 -parte de ella discurre por el trazado de la antigua nacional- y se trabaja en igualarla con el final de la vertiente cántabra de la autovía. Asimismo se están realizando labores de asfaltado tanto en el puente situado en las inmediaciones de Bustio y que permitirá salvar una vaguada de la ría de Tinamayor como entre esta estructura y el límite con Cantabria.

Pero el punto donde se concentra el mayor número de operarios y máquinas es en la bajada de la ladera de Villasola. Allí la autovía discurrirá paralela al nuevo trazado de la N-634, pero en dos niveles inferiores, uno para cada sentido. Se trata de cerca de tres kilómetros de trazado en el que aún restan algunos desmontes y culminar la construcción de la que será la base de la vía rápida para poder completar la construcción de la caja en su totalidad. Precisamente los trabajos en este punto fueron los que ayer obligaron a cortar un carril de la N-634.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

3 meses por solo 1€/mes

Publicidad