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MARTA VARELA
MIERES.
Miércoles, 15 de agosto 2018, 04:33
Un presunto kamikaze provocó el pánico en la autovía A-66 en sentido León-Oviedo. Se trataba de un vecino de Mieres de 80 años que «por confusión», según sus explicaciones, circuló en la mañana del lunes durante nueve kilómetros, entre Mieres y Pola ... de Lena, en sentido contrario. A pesar de la densa circulación y de sufrir varios encontronazos con otros coches, llegó a chocar contra otro vehículo, solo hubo que lamentar daños materiales «menores» y mucho nerviosismo entre algunos conductores que paraban sus vehículos en el arcén durante algunos minutos antes de reanudar su marcha.
El octogenario, que aseguró haberse confundido a la hora de tomar la salida en Mieres, fue detenido y trasladado a dependencias de la Guardia Civil. Allí dio negativo en el control de alcoholemia. Este mierense está imputado por un delito contra la seguridad vial por conducción temeraria y puesto en libertad provisional. Las fuerzas de seguridad intentar clarificar si en realidad se trató de una despiste o se puede considerar como una maniobra de un kamikaze.
Los hechos tuvieron lugar el pasado lunes hacia las siete y media de la mañana entre las localidades de Mieres y Pola de Lena, un tramo en el que la circulación es abundante durante todo el día pero que a primera hora de la mañana se incrementa», explicaron las fuerzas de seguridad. El presunto kamikaze tomó la salida a la autovía A-66, en la zona del campus, donde la señalización vertical fue reforzada hace meses con indicativos de gran tamaño para prohibir el acceso. Tras entrar por ese acceso, empezó a circular hacia Pola de Lena por el carril en dirección Gijón.
Ya en los primeros metros, según testigos presenciales, comenzaron «los pitidos y los volantazos de los conductores que circulaban en dirección correcta, sobre todo camiones», pero el Volkswagen Polo gris en el que viajaba este mierense, que iba solo, continuó con su marcha, completando el recorrido entre los kilómetros 49 al 58. Los últimos tres kilómetros de este peligroso viaje, en el que fue dejando varios retrovisores en la calzada y un pequeño accidente con otro vehículo, los hizo con la Guardia Civil a su lado. Un vehículo oficial e identificado de la Benemérita de Mieres se puso a su lado advirtiéndole con luces y sirenas para que frenase. Llegaron incluso a circular en paralelo para que se diese cuenta de que tenía que parar.
Hacia las 7.45 horas lo adelantaron obligándole a parar su coche, ya en las inmediaciones de Pola de Lena. Los agentes incluso llegaron a bajarse de su vehículo para hacerse más visibles.
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