«Los alcaldes tienen que estar para ayudar al pueblo y acelerar la tramitación». Con estas palabras Antonio Rodríguez, alcalde de la parroquia de Moal, expresaba su indignación ante la lentitud con que avanza el proyecto de apertura de un bar-tienda en esta aldea al pie de cien montañas. Una solicitud que se hizo efectiva en el mes de agosto, pero continúa en 'stand-by' a la espera de que el Ayuntamiento de Cangas del Narcea conceda el permiso de obra.
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Este y otros temas se pusieron sobre la mesa esta mañana durante la reunión mantenida entre los representantes de la asociación local y el director general de Medio Natural y Planificación Rural, David Villar. Si bien se concretaron plazos para la limpieza de los cauces, el director general reconoció que «todavía quedan asuntos pendientes».
La apertura de un bar-tienda no es el único proyecto que la cooperativa local tiene entre manos para dinamizar el día a día de los vecinos. En primera instancia, se encuentra la concertación parcelaria cuyos objetivos son el aprovechamiento de los terrenos baldíos y la creación de empleo. Los vecinos lo tienen claro: sin oportunidades laborales no hay futuro para los pueblos. De ahí que la cooperativa local haya dado un paso al frente contra la despoblación, optando por reinventar la aldea y estimular la actividad económica. «Todas nuestras acciones están encaminadas a dotar al pueblo de cierta autonomía y revertir la sangría demográfica del territorio», ha explicado Antonio Rodríguez.
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