Tormaleo, con agua embotellada ante la falta de salubridad

Las posteriores investigaciones del Consistorio concluyeron que la no potabilidad del agua de esta parroquia -apta para uso doméstico pero no humano- procedían de un abandono en el suministro de cloro de su depósito de agua, por parte de la empresa contratada por el municipio para ello, Sacyr Aguas. « Aunque el Ayuntamiento dispuso incluso del cloro a esta empresa, el depósito de Tormaleo estaba sin clorar», lamentó la alcaldesa, Gemma Álvarez.

A pesar de contratar una nueva empresa que realizara esta función, Aqualia, e invertir 2.000 euros en una nueva bomba de cloro en esta parroquia, el Ayuntamiento continua a día de hoy repartiendo agua mineral a los vecinos de Tormaleo, de 11.00 a 13.00 horas en el polideportivo de Luiña.

«El agua del depósito está ahora clorada de más, al no haber el mismo uso que había antes. Y mientras tanto seguimos repartiendo agua hasta que Aqualia finalice los nuevos análisis que hemos contratado y Salud los dé por buenos o quiera hacer algún otro control», señala Álvarez.