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Hace unos cuantos meses, el arquitecto praviano Jesús Arango pasó por casualidad al lado de la iglesia de San Miguel, en Linares (Salas). Aquel primer vistazo a la construcción le hizo darse cuenta de que ese templo no era como el resto y se puso ... a investigar, sin saber que acabaría dando con todo un hito templario. «Estoy convencido de que es la construcción neotemplaria más importante de España, tantos elementos no los hay en ningún otro sitio», asegura.
Las pruebas para demostrar su tesis empiezan en el lugar en el que se ubica el edificio, entre dos corrientes de agua (cúmulos de energía) y junto a un camino real. Pero hay mucho más porque «la iglesia está orientada como el templo de Salomón» y su ubicación está sumamente pensada. «En algunas ocasiones, un rayo de luz entra por el hueco de una vidriera e ilumina exactamente la cabeza de Cristo».
La arquitectura de este templo también cuenta con dos columnas Boaz y Jakim, que son como las del pórtico del templo de Salomón y, en la puerta, está esculpida la cruz del temple. Además, en la torre de la iglesia, hay una cúpula con ocho columnas y un árbol de la vida octogonal, ya que, para esta orden religiosa, el ocho tenía un fuerte simbolismo.
Aunque quizá lo más llamativo de todo es que el Cristo de la iglesia está crucificado, pero sin cruz porque esta orden la consideraba «símbolo de tortura»
Arango, además, sabe el nombre del cantero que construyó el templo, pero seguirá investigando para descubrir quién la encargó y, sobre todo, para que se repare urgentemente, porque podría ser un reclamo para Salas.
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