La mina de Salave vuelve a tensionar a los vecinos de Tapia y EMC pide no presionar a los funcionarios

El primer comunicado lo lanzó la plataforma Oro No, solicitando al Principado que por «responsabilidad» deniegue la calificación de PIER. «Este proyecto, al igual que sus predecesores, genera un amplio rechazo en todos los sectores económicos y sociales de la comarca como quedó patente con la firma conjunta de un manifiesto por más de 100 asociaciones y entidades profesionales», asegura. «También, a nivel político, hay unanimidad en el rechazo; recientemente, el Pleno del Ayuntamiento de Tapia de Casariego rechazó desde el punto de vista técnico y jurídico la solicitud de la empresa de modificación del PGOU vigente», insistió. A juicio de Oro No la mina pondría en riesgo «la pesca artesanal, la ganadería, el turismo y la agricultura ecológica, entre otras actividades». Temen los vertidos de metales pesados con un emisario y daños en el subsuelo.

La Asociación por la Industrialización del Occidente (Idoa) por su parte solicitó que el Principado dé luz verde al proyecto y recuerda que el pasado año recopiló 3.000 firmas a favor. «Son de vecinos de Tapia, El Franco y Castropol», dijo Lydia Pérez, secretaria de la asociación. Idoa está realizando un sondeo de opinión: «Hemos consultado a unas 100 personas y solo cuatro se cerraban, lo que detectamos es que hay mucha desinformación». Pérez sostiene que el proyecto de EMC «es el único que hay ahora sobre la mesa si queremos calidad de vida y empleos».

EMC pide que el análisis de los técnicos sea «libre de injerencias», asegura que su objetivo es «convivir, completar y potenciar las actividades principales de la comarca, como la agricultura, la pesca, la ganadería y el turismo», y mantiene que «la manifestación más multitudinaria celebrada hasta ahora en la comarca se produjo hace algunos años y fueron más de 1.000 personas a favor de la mina».