Cudillero llora a 'El Ñe', el pescador que falleció tras caer al mar desde la barca en la que pescaba

'El Ñe', de 72 años, falleció ayer mientras pescaba en el mar desde su embarcación. Por motivos que aún se desconocen, cayó al mar y su barca embarrancó en el pedrero de las Llanas de la playa de Las Rubias. Fue, precisamente, ver su barca embarrancada y vacía la que dio la voz de alarma y dio pie a una organización de búsqueda que culminó cuando unos compañeros de la Cofradía de Pescadores de Cudillero encontraron su cadáver flotando en la mar.

'El Ñe' deja mujer, Florentina López, y dos hijos, Noelia y Diego, además de una nieta, Helena. Y deja, también, a su pueblo natal y vital desconsolado.

A las 10.53 horas de ayer se recibió una llamada en el Servicio de Emergencias del Principado (SEPA). Había aparecido varada en las rocas una embarcación en el pedrero de las Llanas de la playa de Las Rubias, en Cudillero.

La alerta llegó, también, a la Policía Local de Cudillero y a la Central Operativa de Servicios de la Guardia Civil y se activó tanto a Bomberos de Asturias como al Helicóptero de Salvamento Marítimo. Sin embargo, el cadáver del propietario de la embarcación fue localizado y recuperado por compañeros de la Cofradía de Cudillero. El cuerpo pertenecía a Antonio Cándano Díaz, de 72 años, conocido como 'El Ñe'.

Según informó la Guardia Civil, tras ser localizada la embarcación embarrancada en el pedrero de las Llanas, las islas de la playa de Las Rubias, se inició la búsqueda por parte de la patrulla de Seguridad Ciudadana del Puesto de la Guardia Civil del Pito, así como de la embarcación Río Tormes del Servicio Marítimo de la Guardia Civil.

No obstante fueron los compañeros del pescador, un pixueto jubilado, que practicaba a diario su afición a la pesca, los que rescataron el cuerpo y lo llevaron hasta el puerto de Cudillero a las 11.30 horas.

Las diligencias las lleva la Guardia Civil de Pravia que analiza ahora si la muerte se produjo tras caer al agua o si el pescador sufrió algún problema de salud mientras manejaba su embarcación.

El pescador pixueto es el segundo fallecido en las aguas del concejo en lo que va de mes. La pasada Semana Santa, una mujer que paseaba con su marido y su perro por el puerto de la localidad se precipitó al agua y fue golpeada por las rocas. Según testigos presenciales, la mujer intentó rescatar al perro, que se había caído al agua, pero fue arrastrada por el temporal Nelson que barría la cornisa. La afectada fue, también, rescatada por una lancha de la Cofradía de Pescadores, que la llevó al puerto.

Aunque llegó a tierra inconsciente y se le practicaron maniobras de reanimación durante más de una hora, no pudieron hacer nada por salvar su vida.

El mismo día, y casi a la misma hora, en San Esteban, un hombre se cayó también al mar. El Grupo de Rescate de Bomberos de Asturias a bordo del helicóptero medicalizado del Servicio de Emergencias del Principado (SEPA) rescató en este caso el cuerpo ya sin vida de la víctima, que se había caído al agua en el espigón.