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Á. RODRÍGUEZ
VEGADEO.
Viernes, 5 de noviembre 2021, 02:50
Después de trabajar su obra en las aulas, el alumnado de los IES de Vegadeo, Luarca, Navia, Tapia de Casariego y el CEB de Boal se encontraron virtualmente ayer con los hijos de Miguel Delibes. La presidenta de la fundación que lleva el nombre del escritor vallisoletano, Elisa Delibes, aseguró estar «encantada de 'volver' al occidente de Asturias, una tierra que tan bien ha tratado siempre la figura del escritor». Su hermano Germán compartió con los alumnos un viejo consejo que el novelista solía darles. «Mi padre siempre nos decía que buscásemos un trabajo que nos gustase porque estaríamos, como mínimo, cuarenta años ganándonos las alubias con el desempeño de esa profesión», apuntó, al tiempo que recordaba las principales aficiones de su padre. Por su parte, Fernando Zamácola, director de la Fundación Miguel Delibes, destacó los objetivos del organismo, así como su carácter privado.
«Nuestro trabajo se orienta a la conservación del legado de Delibes y la divulgación de su figura y su obra, así como el fomento de su estudio y análisis. Sin embargo, queremos llegar más allá y siempre intentamos trasladar a la sociedad los temas que al propio Delibes le preocupaban: la infancia, el medio ambiente, el medio rural y la desigualdad de oportunidades», apuntó Zamácola.
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