Aparece el cadáver «desfigurado» de un hombre en un pueblo cercano a Luarca

«Con los pelos como escarpias». Así reconocían encontrarse este martes los vecinos de la parroquia valdesana de Setienes, tras enterarse del hallazgo de un cadáver en uno de los caminos de la localidad. En concreto, en una zona cercana a la carretera que lleva a La Piniecha, «donde en determinado punto se termina prácticamente el camino», señalaban algunos. La identidad del fallecido no ha trascendido y la Guardia Civil ha abierto una investigación, ya que las magulladuras que presentaba el cadáver son compatibles con una muerte violenta.

El cuerpo se halló en un zona no demasiado transitada, -aunque muy cerca de una de las salidas de la autovía del Cantábrico y una de las entradas principales a la turística villa- en una localidad a dos kilómetros de Luarca, donde según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) del pasado año 2022 viven unas 88 personas. Fue una de ellas, un ganadero que se dirigía con el tractor a su explotación, quien en la mañana de este martes encontró el cadáver, que según pudo saber EL COMERCIO se encontraba «tirado cerca del camino». Inmediatamente avisó a otros vecinos de las casas cercanas, con la intención, por supuesto, de socorrerle en el caso de que estuviera herido. Al acercarse se encontraron un cuerpo «prácticamente desfigurado y lleno de magulladuras», aseguran en la localidad.

Con el enorme susto en el cuerpo, los vecinos alertaron a la Guardia Civil, que movilizó las patrullas de agentes y medios oportunos hasta el lugar donde se encontraba el cadáver, que corresponde a un varón cuya identidad aún se desconoce.

La noticia corrió como la pólvora por el concejo, mientras se intentaba adivinar una horquilla de edad en la que el hombre pudiera encajar. Aunque no hay confirmación al respecto, se cree que el fallecido podría tener entre 30 y 45 años. Las hipótesis se sucedían al paso de las horas y la preocupación no cesaba ante lo trágico del suceso. «Nadie quiere pensar en un final así para un vecino o alguien que conoce. Ni para alguien que apenas conoces tampoco», comentaban algunos.

El vuelo de un helicóptero de la Policía sobre el casco urbano de Luarca al mediodía desató cierta preocupación en la villa donde, por las concurridas fiestas patronales de San Timoteo, muchos lo achacaron al refuerzo de Cuerpos y Fuerzas de Seguridad y labores usuales de control y seguridad ciudadana. Otros pensaron «que podría haber ocurrido algún accidente en la montaña o en el mar, pero nunca un suceso de este tipo, tan trágico «en un sitio tan tranquilo como este», reconocían.

Por el momento, no han trascendido datos sobre la identidad del hombre. Ni detalles del inicio de la investigación. Tras desarrollarse todos los protocolos correspondientes, el cadáver fue trasladado al Instituto de Medicina Legal, ubicado en la capital asturiana, donde se le practicará la autopsia para esclarecer las posibles causas de la muerte.

Mientras tanto, eso sí, Setienes se mantiene en vilo. Con un importante despliegue de medios y agentes en la zona donde apareció el cuerpo sin vida del hombre, los vecinos no logran escapar a la consternación. Aunque «no quieren adelantarse», la sola idea de pensar en una muerte violenta en su tranquila localidad les parece «tan inverosímil como escalofriante». El pueblo de Setienes, en el concejo occidental de Valdés, forma parte de la parroquia de Santiago, junto a otros veinticinco pueblos. Y cuenta con menos de medio centenar de viviendas.

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