«Su amor por el mar nació con él, es una parte de su ADN»

Tras la misa, el marinero jubilado Florentino Pérez entregó, en el muelle, el ramo de plata a Joaquín Álvarez, siguiente pescador más longevo de la cofradía, quien se encargará de custodiar tanto el ramo como la talla de Nuestra Señora de la Atalaya, la patrona de los pescaodres, hasta que el próximo año le toque ceder su testigo.

«Su amor por el mar nació con él, impregnado en su ADN, ya que venía de generaciones atrás. Su padre y su abuelo eran marinos. Le inculcaron, quizás sin querer, ese deseo de navegar cada día en busca del pan y la libertad que le proporcionaba surcar las olas. Sus padres, sus seis hermanos y él vivían en casa de su madre, Concha del Artillero, en La Paloma», relató con cariño la pregonera del ramo, Ana Mari Fernández, sobre Joaquín Álvarez, conocido como 'el Roxo del Artillero'. El homenajeado ayer por su gremio «con 14 años se enroló en el 'Mariví', de junio a octubre de 1951, para ir a la costera de bonito», explicó Fernández. Y también pasó por el vapor 'Eduardo Vicente', el 'Mayuquín' y el 'Socorro Julio', entre otros. En febrero de 1960 sacó el nombramiento de patrón de pesca de litoral en Gijón y en octubre ingresó en la escuela Naútica Pesquera de La Coruña.

Su hoy mujer, 'Cuqui', vivía en la plaza de Cupido, cuando se conocieron. Empezaron a salir en 1961, se casaron cuatro años después y hoy siguen «caminando juntos por la vida con el mismo amor». «Cada día, sin faltar uno, visita a la Virgen de la Atalaya. Ahora les pide a ella y a Dios salud para entregar el ramo el año que viene», señala la pregonera.

A esta tradición marinera acudieron la alcaldesa de Navia, Ana Isabel Fernández, y su teniente de alcalde, Adolfo García, patrón mayor de Puerto Vega y presidente de la federación de Cofradías de Pescadores de Asturias. «Hoy es la fiesta más importante de los marineros de Puerto Vega, un día de mucha emotividad para las familias del mayordomo saliente y del que coge el relevo de custodiar los emblemas de Nuestra Señora de la Atalaya», señaló Fernández.

El nuevo 'mayordomo' recibió obsequios también de las asociaciones de la localidad: la peña La Sardina replicó en plata la carabela 'La Niña', la Asociación del Casino hizo lo propio con su edificio, el Ayuntamiento reprodujo en miniatura las emblemáticas almenas y entregó también un pin del Consistorio, la cofradía de pescadores, por su parte, escogió una placa conmemorativa, un reloj y un ramo de flores, el cual entregó a 'Cuqui'. Por último, la comisión de fiestas entregó al mayordomo saliente, Florentino Pérez, un pin de oro del Cristo marinero y un marco de plata con una imagen de la Virgen. Los aplausos de los vecinos hicieron el resto.