«En el ADN de Valdés y Luarca siempre estará la Guardia Civil»

De impoluto guante blanco y tricornio protocolario, decenas de agentes de la Guardia Civil celebraron, ayer en Luarca, el día de su patrona, la Virgen del Pilar. «Un ejemplo de unidad y esperanza», como señaló el párroco de Luarca Emilio Menéndez, que tiene extensión terrenal en sus fieles agentes de verde. «Su vocación de servicio le caracteriza y le honra, con la Virgen como una guía espiritual», aseguró el cura desde el púlpito.

Ya en el cuartel de Almuña, el capitán de la Demarcación, Carlos Bello, tomó la palabra. «Somos una institución con firmes principios y valores. Algo que no se opone a la necesaria evolución para adaptarnos a las necesidades que demanda la sociedad. Tenemos que seguir esforzándonos. Los ciudadanos tienen que tener la certeza de que ahí donde exista una necesidad de ayuda estará la Guardia Civil» afirmó.

Durante el acto, en el que ocho agentes fueron condecorados, el alcalde, Óscar Pérez, destacó el peso del instituto armado en el concejo. «Alrededor de cien de los cuatrocientos trabajadores públicos en Valdés trabajan en la Guardia Civil. En el ADN de Valdés y Luarca siempre estará la Guardia Civil», aseveró. El veterano Emilio González, de 85 años, también fue homenajeado.