Robo de película en el polígono de Obanca

Un camión de reparto, unos 60.000 euros en maquinaria y cuantiosos daños materiales. Es una primera aproximación a las pérdidas tras el robo perpetrado en la madrugada del miércoles en tres naves del polígono industrial de Obanca, en Cangas del Narcea.

Los hechos se produjeron entre las cinco y las seis de la madrugada. De hecho, la cámara de uno de los establecimientos robados grabó a cuatro individuos encapuchados entrando en la nave. Para ello destrozaron la cerradura de la puerta principal tras cortar los cables de la alarma. Se llevaron «casi 30.000 euros en maquinaria como desbrozadoras y motosierras», explicaba ayer el propietario. Lejos de conformarse con el botín accedieron también a la nave de Comercial Porley. En este caso, rompieron una de las ventanas de la oficina, la única zona que carece de sensores y, una vez dentro, sabotearon la caja que controla el sistema de alarma por radiofrecuencia y el ordenador, por lo que pudieron pasearse a sus anchas por el resto de la nave y llevarse todo tipo de maquinaria. Hidrolimpiadoras, taladros, amoladoras y máquinas de soldar son algunas de las herramientas que el propietario, José Manuel Fernández, calcula pueden alcanzar un valor cercano a los 30.000 euros.

Rapelando por un terraplén

La tercera nave asaltada es la de Transportes Guay. Aquí, la entrada fue aún más espectacular. Los ladrones se descolgaron con una cuerda, que después dejaron allí, por el terraplén de la parte trasera y abrieron un butrón en el portón, por donde accedieron a las instalaciones. Sustrajeron uno de los camiones de reparto que fue localizado ayer mismo en Villanueva (Tineo), a unos 20 kilómetros de Cangas en dirección a Oviedo.

La hipótesis es que fue abandonado una vez que cambiaron los objetos de vehículo para no levantar sospechas. En el resto de la nave, según explicó José García, revolvieron varias de las cajas allí almacenadas, de las que no llegaron a llevarse nada. En su caso, no es la primera vez que tratan de robarle. Hace cuatro meses ya entraron, a través de otro agujero en el portón, e intentaron llevarse un vehículo.

Algunos ayer sopesaban que pudo tratarse de un simulacro, una primera aproximación para estudiar cómo podían entrar en los locales, «porque sabían muy bien cómo hacer para evitar los sistemas de alarma». La Guardia Civil se ha hecho cargo de la investigación. Ayer estuvo trabajando la Policía Científica en la zona para tratar de sacar huellas y otras pistas.