«El objetivo es que un plan general se haga y apruebe en cuatro años, no en los diez de ahora»

–Algo más esquemático. Hay comunidades que separan el plan en dos, de forma que apruebas primero el plan estratégico y luego un plan de desarrollo. Eso tiene ventajas y desventajas que analizamos. Otra opción es simplificar y fragmentar. Que si quieres cambiar las alturas para construir aquí o cómo debe ser esa cubierta lo puedas hacer con una ordenanza, y no modificando todo el plan.

–¿Cuánto se tarda ahora en Asturias en aprobar un plan?

–Los hay atascados que llevan 14 o 15 años. El modelo actual ha hecho de los planes un monstruo que no somos capaces de digerir. Nuestro objetivo es que un plan general se pueda hacer y aprobar en una legislatura, cuatro años, y no en 10 como ahora.

–Además de reducir su contenido, quieren agilizar la tramitación con una ventanilla única.

–Algo que dilata los plazos son los informes sectoriales que emite cada departamento, es decir, Medio Ambiente, Patrimonio, etcétera. Desde la CUOTA vamos a tutorizar su petición y unificar en uno que no será un simple corta y pega de los demás, sino que asegurará coherencia.

–¿Se impondrán plazos?

–Sí. En Extremadura es de tres meses y lo estamos valorando.

–Reordenarán el territorio en «ocho o diez» áreas funcionales. ¿Cómo se delimitarán?

–Desde el Principado junto a los ayuntamientos.

–¿Qué dice de Asturias que todo intento de dar forma jurídica al área central fracase?

–No sería tan negativo como eso. El único intento de crearla a nivel jurídico fue el convenio de la legislatura pasada. Si desde la ley trabajamos en la ordenación y en políticas de movilidad, tarde o temprano acabará cayendo ese instrumento jurídico para posicionarnos en Europa como un ente de 850.000 habitantes.