Multas de hasta 5.000 euros por conductas negligentes

Aunque los motivos por los que se determine la obligatoriedad del pago pueden ser variados, el uso de ropa inadecuada, ignorar las alertas meteorológicas o acudir a rutas poco recomendables sin estar federados y bien equipados son las principales causas.

Varios sancionados han llevado su malestar a los tribunales, pero la Justicia avala este cobro que, según indicó con sentencias anteriores, se produce con arreglo a la ley. En algunos casos, los rescatados se han visto obligados a abonar más de 5.000 euros. No se trata de una cuantía simbólica, ya que las imprudencias comprometen gravemente la seguridad no solo de quienes las cometen, sino del resto de usuarios y de los equipos de rescate. El Principado siempre ha defendido esta medida como una forma de exigir responsabilidad a la ciudadanía.

No existen cifras oficiales sobre los casos en los que se ha iniciado la tramitación para el cobro en 2021, pero a tenor de años anteriores, y en caso de que se mantenga la tendencia, podría superar el 20% de los casos en los que ha sido precisa la intervención de los grupos de rescate. Hasta la fecha, en todos los rescates en los que se decretó el cobro a posteriores había intervenido el helicóptero medicalizado, cuyo coste de operación es muy elevado.

Solo la Guardia Civil realiza de forma gratuita los rescates. Según explicó el SEPA, el hecho de cobrarlos «solo tiene afán disuasorio y bajo ningún concepto fines recaudatorios». No se trata de compensar a la Administración por los costes generados, sino de ser una medida disuasoria eficiente.

No obstante, Asturias es una de las regiones que menos cobran por los servicios. La hora de vuelo del helicóptero se sitúa en torno a los 1.200 euros, aunque podría ascender ligeramente en función de la complejidad del vuelo. Poco que ver con Cataluña, donde cada 60 minutos superan los 3.000 euros.