«La movida en el funeral fue de campeonato»

El recorrido hasta el cementerio y el entierro tampoco fue algo que el cura quiere rememorar, que «respeta» a todos, pero que fue «muy duro» vivir en primera persona. La sobrina, encima del ataúd, abrazado a él, gritando todo lo que quería a su tía, resuena entre los que asistieron a las exequias. Ayer, mientras atendía a los niños de la zona en la catequesis, en la iglesia de San Julián de Viado, en Santullano, intentaba no volver a pensar en lo que ocurrió a su vecina.

Y es que, como cuenta su vecina María del Mar, 'Isabel la de la cabañuca', como la conocían en la zona, «era una mujer muy buena» y «la movida en la iglesia durante el funeral fue de campeonato». Aunque ya casi se había olvidado, vuelve a comentarse entre la población.

Que había «follones» en la familia se supo luego, pero de ahí a cómo discurrieron los acontecimientos y al punto en que todo se encuentra, hay un largo trecho «que nadie de aquí nos pudimos imaginar». Con su eterno paraguas, su carrito de la compra en el que llevaba fruta y verduras para vender y un amplio sombrero para resguardarse del sol es como intentan rememorarla sus vecinos, pese a los momentos que se viven entre la población de Las Regueras.