«Me molieron a palos y se llevaron lo que había en la caja»

A las diez de la noche del viernes se disponía a cerrar la verja de la gasolinera de Gesmaesa, en Riaño, cuando, indicó, «escuché un coche que venía rápido, pero no le di importancia». Segundos más tarde, el copiloto del vehículo se abalanzó sobre él para propinarle un fuerte golpe en la cabeza. «Caí y me mantuvieron en el suelo reducido hasta que se fueron», relató. Como llevaba una mochila en la espalda, los asaltantes creyeron «que me llevaba la recaudación» por lo que sus golpes eran cada vez más violentos. «Cuando me arrebataron la mochila y se dieron cuenta que no había dinero, cargaron contra la puerta de cristal para poder entrar». Aunque los asaltantes consiguieron entrar, el botín no superó los doscientos euros. A consecuencia de la paliza, el trabajador presenta fuertes golpes en la cabeza y una luxación en un hombro. «Aún tengo el susto metido en el cuerpo, tengo que pensar que podía haber sido peor», reconocía. La de Riaño fue, cronológicamente, la primera de las tres gasolineras asaltadas durante la noche del viernes. Le siguieron la de La Isla, en Soto del Barco, y la de El Montico, en la autopista 'Y' dirección Avilés.

Pasadas menos de veinticuatro horas, dos de los asaltantes fueron detenidos por agentes de la Guardia Civil. Fue la denuncia interpuesta por un avilesino tras el robo de su Seat León negro lo que puso sobre la pista a las fuerzas de seguridad. Aunque estaba previsto que ambos pasarán a disposición judicial ayer, será hoy cuando los detenidos quedarán pendientes de la resolución del juez.

En las nuevas imágenes a las que ha tenido acceso EL COMERCIO, se aprecia cómo los atracadores, visiblemente exaltados, se bajan del coche para propinarle numerosos golpes al trabajador, y cómo entran en el establecimiento rompiendo la puerta de cristal para arrancar de cuajo la caja registradora.

A pesar de la detenciones del sábado, e incluso las del domingo 24 de noviembre, la investigación policial continúa abierta porque, según fuentes policiales, se trata de una operación muy compleja.