El teatro Prendes, una joya arquitectónica entre las mejores de estilo moderno

El teatro candasín tardó en construirse dos años (1953-1955) y su diseño es obra de José Antonio Muñiz. Su arquitectura destaca, en palabras del Colegio de Arquitectos de Asturias, «por la resolución del edificio, con un prisma de proporción horizontal de ladrillo y hormigón que se integra entre los volúmenes de los bloques de viviendas vecinos». Conserva importantes elementos originales, como las puertas del vestíbulo, los pasamanos o la zona del bar, ubicada en la primera planta. Además, no ha sufrido importantes modificaciones que alteren su morfología, aunque el mobiliario ha tenido que adaptarse con el paso de los años.

Se inauguró el 1 de enero de 1956 con la proyección de la película 'Cuando ruge la marabunta' y en 1989 pasó a ser gestionado por el Ayuntamiento de Carreño. Precisamente, el equipo de gobierno lleva los últimos años realizando distintas gestiones para hacerse con la propiedad del inmueble, lo que supondría un importante beneficio para las arcas municipales.

El teatro es el cuarto inmueble del concejo que se incorpora al registro de la Fundación Docomomo. El inventario incluye la Ciudad de Vacaciones de Perlora (de los arquitectos Federico Somolinos Cuesta y Francisco Somolinos Cuesta), un grupo escolar de Aboño (obra de Mariano Marín Rodríguez-Rivas y Luis Masaveu) y la central térmica de Aboño (de Joaquín Vaquero Palacios e ingenieros de HC).

Sobre estas obras hablará el arquitecto José Ramón Puerto en la conferencia organizada el sábado tras el descubrimiento de la placa. La Fundación Docomomo ha documentado cerca de 1.200 obras en España y Portugal realizadas entre 1925 y 1965, agrupadas en un registro general y tres registros temáticos sobre industria, vivienda y equipamientos. Aunque a partir del 2014 la fundación decidió ampliar el rango de fechas al considerar que muchas de las obras excluidas eran «perfectamente adscribibles a la modernidad arquitectónica».

Cada año aprueban la inclusión en el inventario de nuevas edificaciones. En el caso de Asturias, las candidaturas son presentadas por el Colegio de Arquitectos «a través de la labor realizada por el grupo de Patrimonio, en su deseo de preservar, dar a conocer y proteger la buena arquitectura existente en nuestra región».