La Policía reforzará la vigilancia en La Peñona ante las aglomeraciones de jóvenes

El Ayuntamiento de Castrillón descarta el cierre de este espacio al aire libre, que es uno de los iconos turísticos de la localidad en temporada estival. «No vamos a cerrar el acceso al Museo de Anclas porque algunas personas cometan imprudencias, debe imperar el civismo», decía ayer Iván López, concejal de Interior y Seguridad. El refuerzo de la Policía Local se centrará en evitar grandes grupos de personas de manera que se asegure que se guardan las distancias de seguridad. «El problema está en que cuando ven aparecer la patrulla suelen separarse y, si están tirándose en las rocas, pues dejan de hacerlo. Es complicado. Deberían entender que hay cosas que en esta situación en la que estamos no se pueden hacer», decía el edil.

Saltar desde la vieja zona de trampolines no es una moda nueva de este verano. Todos los años algunos jóvenes se acercan a esas rocas para saltar al mar cuando la marea está alta. Los socorristas lo saben. «No se va a hacer más hincapié del que se hace siempre. Los socorristas, cuando están en su turno, están al tanto de la playa, pero no vamos a pedirles que hagan de vigilantes», dicen en el Consistorio.

Las reuniones de jóvenes no siempre son para pasar el rato simplemente, esta misma semana se celebró en La Peñona un botellón, lo que genera quejas entre los vecinos de la localidad por todo lo que supone. Además, el pasado jueves una menor sufría heridas tras caer al agua desde las rocas. «Fue una imprudencia que no debía cometerse. Tuvo el accidente al saltar de la barandilla, y hay que tener mucho cuidado», destacó Iván López, que recordó que «hace unas semanas todos iban al pinar y a base de presencia policial conseguimos relajar la situación».

Aunque el acceso no se vaya a prohibir, sí se plantean la posibilidad de instalar nuevas señales que indiquen la prohibición de tirarse al mar desde La Peñona. «Tenemos que hacer hincapié en la prevención y la seguridad», decía ayer la alcaldesa, Yasmina Triguero, tras la reunión diaria mantenida con la Policía Local.

Además, este fin de semana, en el que se prevé que haga sol, se ha decidido volver a contratar al equipo de seguridad privada que prestará sus servicios en Bayas ante el posible aluvión de bañistas como sucedió el pasado fin de semana. «Tratamos de controlar la situación en todas las playas con refuerzo de agentes y vigilancia. El problema con los jóvenes este año es que no tienen otras alternativas de ocio por las restricciones sanitarias. Muchas de sus actividades aún no están permitidas y buscan esos espacios en la playa», comentó el edil.