«Parece que no encontramos el sitio ideal para hacer deporte»

El parque de ejercicios para personas mayores de Candás no pasa por su mejor momento. Los usuarios de estas instalaciones de gerontogimnasia, cuyo objetivo es ayudar al mantenimiento de la movilidad, señalan que prácticamente la totalidad de los elementos se encuentran en unas condiciones deficientes, con óxido y roturas que pueden suponer un peligro a la hora de su uso.

«Los asientos están medio rotos, y hay algunos que incluso pueden llegar a hacerte daño si no te andas con cuidado. Es un equipamiento que debería estar en buenas condiciones ya no solo porque lo usemos las personas mayores, sino porque están al aire libre y cualquiera puede acercarse, aunque sea jugando, y hacerse daño», expresó José Luis Martínez, que se reconoce como usuario del parque de gerontogimnasia «cuando puede usarse». Este considera que la zona en la que se encuentra el parque es tranquila y muy bonita, con amplios espacios verdes que permiten pasear, aunque la cercanía al mar puede jugar una mala pasada. «Esta al borde de la costa, no tiene edificios que les protejan, y así se termina oxidando en seguida», expone Martínez.

Esta ubicación se trata de la segunda que tiene este parque en la capital del concejo. En un primer momento, estos aparatos de gimnasia fueron ubicados en las inmediaciones del centro de mayores de la villa, en la zona trasera del centro polivalente La Baragaña, pero tras las peticiones de los vecinos, se decidió ubicar el parque en su actual emplazamiento, el área recreativa cercana al instituto, en la calle . «En la ubicación anterior estaba más céntrico, y para quienes no puedan caminar mucho seguro que era mejor, pero también es cierto que tiene más sentido en esta zona, más deportiva, y no en medio de Candás. Pero aquí en seguida se ponen feos. Parece que no encontramos el entorno ideal para que los mayores podamos hacer deporte» señaló la candasina María Teresa Rodríguez. «No llevan mucho tiempo así, se hace un mantenimiento, pero es que contra la brisa marina no se puede pelear, y por mucho que se cuide no se soluciona nada. Igual este tampoco es su sitio, pero ya no sé dónde lo podrían poner entonces», añade María Dolores Muñiz.

El Ayuntamiento de Carreño es conocedor de la situación, y si bien aseguran que este enclave fue seleccionado por expreso deseo de los vecinos, motivo por el que no se plantean un cambio de ubicación, si que afirman que ya se trabaja por solucionar este problema. «Se realizará una restauración de los aparatos, que se mantienen periódicamente y solemos poner a punto tras la primavera, porque además del efecto del mar, con la humedad y las lluvias del invierno los aparatos también sufren más», explicó Amelia Fernández, alcaldesa de Carreño, que añadió que en esta zona verde también se trabajará para mejorar los accesos, el mantenimiento y la limpieza al tratarse de un espacio muy valorado por los vecinos para la práctica deportiva.

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