Las obras de mejora de la carretera de Regueral comenzarán el próximo año

La elaboración del proyecto técnico para reparar y acondicionar la carretera CE-1 entre Regueral y el núcleo rural de Zanzabornín, estará listos antes de que finalice el año para poder iniciar las obras en 2020. Este es el plazo que maneja la Consejería de Infraestructuras, según se desprende de la reunión mantenida entre la alcaldesa de Carreño, Amelia Fernández, y el consejero Juan Cofiño. En la misma se abordó la situación de la red viaria autonómica en el concejo, con la planificación de prioridades de cara al actual mandato. De todas las previstas, la que se llevará a cabo en la CE-1 es la más importante, con una inversión inicial de cerca de 1,15 millones euros, ya que la vía da servicio a los municipios de Carreño y Gozón.

El proyecto fue encargado a la firma consultora Noega Ingenieros S.L. por 21.598 euros. Tras efectuar algunas consultas con el vecindario para ajustarlo a las necesidades, finalmente se contrató en marzo de este año. Según trasladó Cofiño a la alcaldesa, «la intención es que el plan sea presentado a los vecinos cuando sea posible».

Otra de las actuaciones pendientes y que se trató en la reunión en Oviedo fue la reparación del hundimiento de una parte del mirador de La Formiga. Esta obra se incluirá en los presupuestos de 2020, donde se llevará a cabo la construcción de un muro de 20 metros. En cuanto a otras necesidades en materia de comunicaciones, Amelia Fernández fijó como prioridades la mejora y adecuación de la carretera C-2, al tratarse de un vial que en la época estival registra mucho tráfico procedente de las playas de Perlora y Candás. Otros temas pendientes son la carretera CE-6, que requiere de una mejora en su señalización y la construcción de un tramo de acera desde el Centro de Iniciativa Rural (CIR) de Pervera y Casa Celesto. En este vial también se plantea la renovación del firme.