ALEJANDRO L. JAMBRINA
SAN ROMÁN DE CANDAMO.
Viernes, 12 de noviembre 2021, 02:05
Oculto en los montes de Candamo, en la localidad de San Román, hay una casa de comidas de las de antes, de las que ya van quedando pocas. Un negocio tradicional y familiar que este verano cumplió la friolera de veinticinco años abierto al público. ... Es el Llar de Viri, un modesto negocio rural que ahora se codea con las primeras espadas de la cocina sostenible, algo que nadie habría podido imaginar hace un cuarto de siglo.
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El alma del Llar es Viri Fernández, única cocinera asturiana galardonada con una Estrella Verde por la prestigiosa Guía Michelin, un distintivo internacional que pone en valor la sostenibilidad, el cuidado de la materia prima y el uso de productos de cercanía.
Viri es una precursora, obtuvo este certificado antes que nadie en Asturias, y ahora le llega un nuevo premio a la altura de su categoría. El próximo 29 de noviembre dará el salto desde San Román de Candamo a Valencia, donde participará en el Gran Debate de la Gala de la Guía Michelin España & Portugal 2022.
Ha sido seleccionada para compartir mesa con nombre tan reconocidos de la gastronomía nacional como Ricard Camarena (Restaurante Ricard Camarena), Ángel León (Restaurante Aponiente) o Rodrigo de la Calle (Restaurante El Invernadero). Todos ellos premiados con varias Estrellas Michelin, pero Viri no se achanta ante tales galardones.
«Hombre es un privilegio, un honor y una responsabilidad. Estos días estoy estudiando para estar a la altura, desde luego que sí, porque estar con esos cocineros es de mucho nivel y te da respeto», confesaba ayer esta candamina, que mantiene vivo el fuego en su Llar desde hace veinticinco años.
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Formar parte del equipo titular de las estrellas de la gastronomía ya está asegurado. Ahora falta saber si este año revalidará la Estrella Verde por segundo año consecutivo. «Yo no quiero aventurar nada, eso no se sabe», confiesa con modestia. Pero todo apunta que así será porque en el Llar de Viri siguen manteniendo el buen hacer de toda la vida.
Hoy en día Viri ha dado un paso a un lado y la casa de comidas la gestiona su hijo, Daniel López, y su nuera, María José Miranda. «Tenemos un huerto propio del que sacamos los productos, además le decimos al cliente cuantos kilómetros ha recorrido la comida que le ponemos en el plato, es nuestra manera de trabajar», explica Viri.
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Su cultura gastronómica ya le ha valido otros reconocimientos internacionales como el galardón Slow Food o el distintivo BibGourmand que le otorgó la Guía Michelin en 2019.
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