A. G.-O.
Jueves, 29 de diciembre 2016, 00:13
El Ayuntamiento de Carreño ha culminado en los últimos días una serie de mejoras para facilitar el acceso de las personas con movilidad reducida a las instalaciones del Museo Antón. Así, se ha construido una rampa fabricada en madera y composite con tablas macizas de 145 por 22 milímetros. La pendiente cuenta con una serie de dibujos que impiden que las sillas de ruedas puedan resbalar en caso de lluvia. Además, se han habilitado unos baños adaptados en la planta baja del edificio. La rotulación exterior también ha sido mejorada.
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Estas medidas han sido realizadas tras la presentación de un informe técnico por parte de Asociación de Parapléjicos y Grandes Minusválidos del Principado de Asturias (ASPAYM). En este documento enumeraban las deficiencias en cuanto a la accesibilidad que había en el municipio y que debían solventarse.
Algunas de ellas, fueron incluidas en el presupuesto anual del Patronato de Servicios Municipales, que fue aprobado con los votos de todos los partidos políticos presentes. Además, contó con el apoyo de mayoría de los representantes de los centros educativos y movimientos sociales.
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