Los vecinos de Arroes piden más seguridad en la N-632

La localidad maliaya de Arroes cuenta, desde este fin de semana, con asociación de vecinos. La junta directiva se constituyó tras una asamblea, celebrada en el llagar de Buznego, en la que salió elegido presidente Vicente Rafael Gimilio.

El colectivo lleva el nombre de Javier de Arroes, en honor a Javier Díaz Fernández, vecino de la parroquia, exconcejal de Villaviciosa y folclorista entregado a la conservación de la música tradicional asturiana. «Éramos uno de los pocos sitios en los que no había asociación y creo que es bueno para aportar ideas y sugerencias para mejorar la parroquia, pero también para estrechar vínculos. En la zona rural hay mucha dispersión y la gente no se conoce», señaló Gimilio. Una espicha tras la asamblea sirvió como primera actividad de confraternización.

Pero si hay algo que preocupa a los vecinos de Arroes es la seguridad en la carretera nacional 632. El tramo que cruza la parroquia está entre los más peligrosos de la red de carreteras españolas. El colectivo reclama que se complete la renovación del firme del tramo comprendido entre las localidades de Venta las Ranas y Venta la Esperanza, aunque Gimilio asegura que «el problema se solucionará con un nuevo trazado y el no hacerlo se está pagando con vidas».

Arroyo «obstruido»

Además de presidente del colectivo es el delegado territorial del equipo de gobierno en la zona y quiso agradecer a su antecesor en este último puesto, Julio Paraja, «todo lo que hizo y lo poco que ha dejado pendiente, como el arreglo de varios caminos y la limpieza del arroyo de Arroes, que en la actualidad está obstruido».

Junto a Gimilio, forman parte de la junta directiva Ricardo Riera, vicepresidente; Lucía Ezquerra, secretaria; Andrés Pérez, vicesecretario; Antonio Morís, tesorero; Juan Cano, vicetesorero; y, como vocales, María Claret Díaz, María Rosario Pérez, Orlando Díaz, Inés Martínez, Pablo Conesa, Marta de la Granda, Javier González Vallina, Beatriz Riera y José Luis Domenech.