Mantienen imputados por homicidio a los dos agresores del gaitero asturiano Javier Solares

Según se desprende del atestado policial elaborado por la Guardia Civil y aportado a la causa, la víctima recibió un puñetazo en la cabeza que le hizo caer para atrás y golpearse contra el suelo. Presentaba también contusiones en otras partes del cuerpo provocadas por las patadas que le fueron propinadas cuando yacía sobre el asfalto.

Los hechos tuvieron lugar a la salida de un restaurante en Potes, a donde Javier Solares se había desplazado junto a su compañera sentimental para encontrarse con unos familiares. Después de cenar en el establecimiento hostelero, y cuando se disponían a abandonar el local, se encontraron con los dos jóvenes, quienes, según relataron los testigos, comenzaron a increparles.

Habría sido al tratar de que depusiesen su actitud, cuando la víctima recibió un fuerte puñetazo en la cara, lo que hizo que se desplomase y se golpease brutalmente contra el suelo, lo que le causó una fractura craneoencefálico. Murió en el acto. Pese a que los dos individuos abandonaron precipitadamente el lugar, la descripción facilitada por los acompañantes del gaitero, permitieron a la Guardia Civil identificarles y localizarles poco tiempo después.

Tanto ante la Benemérita como luego ante el titular del juzgado de guardia, ambos aseguraron que no hubo intencionalidad de matar y que se había tratado de «un accidente». Según la versión de los investigados, el propio Javier Solares habría golpeado primero, antes de recibir el puñetazo en la cara que le hizo caer. Este extremo se contradice con la declaración de los tres acompañantes de la víctima, quienes relataron que fueron los dos jóvenes los que golpearon al hombre después de que le pidiese que se fueran y dejaran de molestarles.

El juez decretó su puesta en libertad con cargos, con los de homicidio imprudente. Además, les obligó a entregar sus respectivos pasaportes para evitar que salgan del país y mantiene la orden dictada de comparecer de forma periódica en el juzgado de San Vicente de la Barquera, sede del partido judicial al que corresponde la localidad de Potes.

A la instrucción se han aportado y solicitado varias pruebas, como el informe forense que determinó que el deceso se produjo por un severo traumatismo craneal, así como las grabaciones de un banco que captaron parcialmente los hechos y las declaraciones de los testigos. El juez dará traslado a la fiscalía próximamente para que especifique si aprecia indicios de criminalidad.