Luis Lorenzo y Arantxa Palomino, esperanzados en los informes toxicológicos

Una química del Instituto Nacional de Toxicología declaró el pasado miércoles en el caso de Luis Lorenzo y de su mujer, Arantxa Palomino, acusados de envenenar hasta la muerte a la tía de esta. Durante su intervención incidió en la posibilidad de que el cadmio hallado en la sangre de la octogenaria podría deberse a un trasvase 'post mortem'. Según la pericia, María Isabel murió por intoxicación de este metal al detectarse una presencia en niveles muy superiores a los normales.

Una noticia que resultó esperanzadora para la pareja pues de esta declaración dependía la aprobación de un informe al hospital Gomez Ulla para aclarar si la fallecida tenía restos de los metales pesados en alguno de sus órganos vitales. Entre sus argumentos ha respaldado los estudios de 66 personas de Estados Unidos y China y que, aunque sus circunstancias no guardan semejanzas con la muerte de Palomino, sí puede ser posible en el caso de María Isabel Suárez, según publica ABC.

Las conclusiones que arrojen estos análisis, en los que Luis Lorenzo y su pareja tienen puestas las esperanzas, pueden ser determinantes para explicarla aparición de cadmio sin necesidad de intoxicación. Los expertos habían descartado que la mujer falleciera por un accidente cerebrovascular, tal y como constaba en el certificado de defunción, al no constar trauma craneoencefálico y confirmaban la muerte por envenenamiento.

En su declaración judicial, Palomino no solo negó los señalamientos, sino que explicó que se había desvivido por cuidar a su familiar. Siguiendo con su versión, así lo corroborarían todos los informes médicos que recibió la víctima María Isabel Suárez. Sin embargo, las diligencias policiales hacen referencia a que «se encontraba en un estado de abandono».

Lorenzo, por su parte, todavía no se ha enfrentado a las preguntas de la juez ni la acusación, y tras los últimos acontecimientos, el actor ha optado por no comparecer en los juzgados y ha decidido esperar a conocer nuevos informes para ofrecer su declaración.

A pesar de que los forenses ratificaron que la mujer murió por intoxicación aguada de metales pesados y que la gran cantidad de medicamentos que tomaba, la defensa, que ha mantenido siempre su inocencia, había solicitado la aclaración sobre s si los niveles de cadmio detectados en Isabel Suárez se pudieron dar de forma natural sin necesidad de envenenamiento. Hasta ahora, los expertos habían descartado esta teoría ante la alta dosis detectada, 200 veces más de lo normal.

La investigación por el presunto homicidio de la tía de su mujer comenzaba el pasado 27 de mayo, cuando la pareja fue detenida por la Guardia Civil a raíz de una denuncia del hermano de la víctima. Aunque la muerte de Isabel Suárez Arias se produjo el 28 de junio de 2021, ha sido este año cuando ha saltado a la luz que la mujer podría haber sido asesinada. Una noticia que provocó una gran consternación entre los vecinos de Grado, localidad en la que residía Isabel.

El movil económico es el que sostienen los familiares de María Isabel que llevó a la pareja a cometer el presunto homicidio. José María Suárez, hermano de la fallecida que reside en Avilés, sostiene que la muerte no fue por causas naturales.

Sospechó desde el principio de su sobrina, Arantxa, y su esposo, el conocido actor Luis Lorenzo. Sus recelos surgieron cuando poco antes del fallecimiento, en mayo del año pasado, María Isabel decidiera cambiar su testamento, a favor de sus cuatro hermanos, para declarar heredera universal a su sobrina Arantxa, a cargo de la cual estaba desde hacía meses.

La pareja reconoce que, efectivamente, hubo «algún cambio» en el testamento de Isabel Suárez, natural de Grado, aunque residió varios años con su esposo en Las Regueras, y que en el momento de su muerte se encontraba con ellos en Madrid. «Fue en pequeños detalles sin apenas importancia», según ha relatado el abogado que lleva la defensa de la pareja, Francisco Pérez Platas, con despacho en la capital del Principado.

En las diversas declaraciones realizadas por los testigos, quedaría reflejado el interés u obsesión que tenía Luis Lorenzo por el dinero y además, según fuentes de toda solvencia consultadas por ABC, le habría trasladado su felicidad a su hijo ante la muerte de Isabel Suárez Arias en junio de 2021: «Ya se ha muerto la tía, ya podemos comprarnos la casa que queremos en Madrid».

Tras comparecer ante la jueza, quedaron en libertad con la obligación de entregar el pasaporte y comparecer cada semana ante el juzgado más próximo a su domicilio. Las medidas cautelares se ratificaron el pasado viernes tras la celebración de una vistilla de prisión en la que solo solicitó su ingreso en la cárcel el abogado de la acusación particular.

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