El drama de las listas de espera en Asturias: el Defensor del Pueblo insta a Salud a operar a una mujer con tres años de demora

En este contexto hay una asturiana que ha optado por recurrir al Defensor del Pueblo para denunciar su caso. La institución que preside Ángel Gabilondo abrió una pesquisa para aclarar la situación, recabó informes de la Consejería de Salud, y ha concluido amparando a la ciudadana.

El dictamen, que el presidente de la institución, Ángel Gabilondo, firmó el 3 de septiembre, indica que la ciudadana entró en noviembre de 2021 en la lista de espera para una intervención traumatológica en el Hospital de San Agustín (Avilés). Salud adujo que el 1 de abril de 2022 «se le ofreció derivarla a otro centro para que fuera intervenida», opción que la paciente rechazó, saliendo así de la lista de espera prioritaria y entrando en la «no estructural».

Gabilondo entiende que «la excesiva demora quirúrgica» alcanzada «no se compadece con la obligación que incumbe al sistema público sanitario de ofrecer, no sólo el contenido nominal de las prestaciones, sino también la forma de obtención de las mismas en lo referente a tiempo y accesibilidad, para lo que se requiere una dotación de medios acorde con el derecho de los ciudadanos a recibir una atención sanitaria de calidad». Recuerda además que existe un real decreto reconociendo el derecho de todo ciudadano a disponer de «información personalizada sobre la espera prevista en relación con su proceso asistencial».

Por todo ello el Defensor del Pueblo requiere a Salud para que aclare en qué posición de la lista está la paciente y si «a la vista del tiempo transcurrido» se ha considerado ofrecerle la intervención en otro centro. También sugiere que «ante el largo de tiempo transcurrido» se opere a la paciente «adoptándose para ello las medidas organizativas y asistenciales pertinentes».

En septiembre quienes fueron intervenidos por el servicio de Traumatología del San Agustín llevaban una espera media de 216 días. Había 1.116 pacientes en cola para ser intervenidos, y de ellos a 816 por el momento no se le había dado oportunidad de ser atendidos en otro centro.

En la clase política las dimensiones de la lista de espera dejaron pistas. Desde el grupo socialista e IU-Convocatoria, socios de Gobierno, se defienden avances y desde PP y Vox, llueven las críticas. En vísperas de la negociación presupuestaria, Adrián Pumares (Foro Asturias) y Covadonga Tomé (Grupo Mixto), que controlan los votos más asequibles para que el Ejecutivo de coalición alcance la mayoría necesaria para sacar adelante las cuentas, emiten en frecuencias bien distintas.

Pumares cargó contra la «nefasta» gestión de «un gobierno agotado, sin ideas». «La incompetencia e incapacidad del Gobierno de Barbón pone en peligro la salud de los asturianos», indicó, acusación que evidencia una distancia difícil de salvar en la negociación presupuestaria.

Por su parte Tomé fue crítica pero instó a «abordar ya medidas valientes», entre ellas, el trabajo vespertino y optimizar las contrataciones. Según recordó, forman parte de una batería de ideas que propuso en la Junta General y fueron aprobadas por unanimidad, lo que facilita que vea su reflejo en las cuentas de 2025.