IU de Asturias y Covadonga Tomé acogen la rebaja del IRPF con frialdad, la derecha habla de «anuncio improvisado» y «a rebufo»

El debate fiscal asturiano entró en una nuevo dimensión, con los socialistas anticipando por sorpresa que llevarán al Consejo de Gobierno una rebaja del impuesto de la renta (IRPF) para las clases «medias y trabajadoras». La noticia fue acogida con frialdad en las formaciones a la izquierda del PSOE, con un discurso fiscal más propenso a subir tributos a las rentas altas y poco amigo de entrar en competencias entre territorios por ver quién rebaja más. A la derecha se entendió como un refuerzo al discurso de que Asturias supone un «infierno fiscal». Cabe recordar que la medida, para salir adelante, requiere de unos apoyos en la Junta General que ayer nadie comprometió a los socialistas.

En IU-Convocatoria, socio menor de ese Ejecutivo, se impuso el silencio tras la noticia. «No hay comentarios», reiteraron sus portavoces.

Es una reacción elocuente. En materia fiscal el acuerdo de gobierno incluyó un compromiso vago para «preservar un sistema tributario redistributivo». El camino andado desde entonces evidencia que IU-Convocatoria trató de forzar un debate sobre la oportunidad de crear nuevos tributos o subir los existentes a las rentas altas, y que de hecho negoció con el consejero de Hacienda una proposición no de ley en ese sentido, pero la operación fue abortada por el presidente Adrián Barbón, quien rechazó que hubiera acuerdo alguno para subir impuestos y defendió que «Asturias lo que tiene es un sistema fiscal justo». El desmentido fue asumido entonces por el socio menor a regañadientes.

Covadonga Tomé, la diputada independiente a la que ahora mira el Gobierno para sumar los votos suficientes con los que sacar sus proyectos, tampoco acogió con entusiasmo la noticia: «Esperamos que se sienten a negociar con nosotras esa reforma, antes de anunciar medidas para las podrían necesitar nuestro apoyo. También esperamos que la reforma sea realmente progresista». Horas antes criticó la rebaja de Salvador Illa porque «se parece bastante a lo que planteó aquí el PP la semana pasada».

En el bloque de la derecha no se ocultaba el asombro. Beatriz Polledo, por parte del PP, lamentó que «los asturianos lleven años sufriendo impuestos desproporcionados por la cabezonería socialista» y tildó de «improvisado» el anuncio. El Gobierno «se ve forzado con hipocresía por la decisión de Salvador Illa, luego de que toda la izquierda votase la pasada semana en contra de la propuesta del PP para aliviar la carga impositiva de los asturianos».

Gonzalo Centeno, de Vox, consideró que el Gobierno «reacciona ante lo que digan los políticos catalanes y la Moncloa, despreciando lo que ha dicho la oposición y el sentido común durante estos últimos cuatro años».

Adrián Pumares, de Foro, entiende que estamos «ante un gobierno sin ideas y que va a rebufo. El acuerdo de Foro y el PP desnudó que carecen de proyecto e ideas y ahora quiere aparentar que hacen algo».

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