ángela rodríguez
Martes, 17 de agosto 2021, 22:00
Un monte vecinal sobre el pueblo de Andeo, en el concejo de Ibias, ha ardido por segunda vez en menos de un mes. Los vecinos alertaron, pasadas las 17 horas, al Servicio de Emergencias 112 quién movilizó de inmediato a sus efectivos. «Cuando llegamos, ... sobre las 10 de la noche, estaban intentando por todos los medios apagar el fuego», asegura María Díaz, una de las pocas vecinas del pueblo. Andeo, situado a 550 metros de altitud, cuenta con alrededor de 7 habitantes durante todo el año. Hasta allí se trasladaron dos helicópteros del SEPA, dos empresas forestales, personal de la guardería del Principado, y bomberos del servicios de los parques de Ibias, Grandas de Salime y Cangas del Narcea. También se acercaron por tierra agentes de la Brigada de Refuerzo de Incendios Forestales (BRIF) de Tineo.
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Eran las 20.12 horas cuando la consejera de Presidencia, Rita Camblor, declaró el paso a fase de emergencia en situación 0 del Plan de Incendios Forestales del Principado (INFOPA). En un concejo como Ibias, uno de los tres municipios asturianos que, junto con Cangas del Narcea y Degaña, contaba el lunes con el índice de riesgo forestal «muy alto», fue necesario dar paso a la fase de emergencia en situación 1 pasadas las 22.30 horas. Ante la evolución del fuego, se programó la incorporación de medios extraordinarios al operativo de extinción, en concreto un hidroavión con capacidad de carga de 5.500 litros, dos aviones anfibios de 3.100 litros cada uno, el helicóptero bombardero Kamov con 4.500 litros, y varios helicópteros multifunción de Bomberos del SEPA, según datos del propio servicios de emergencias.
La batalla se libró al caer la noche. «Era un infierno, estaba descontrolado», asegura Gema Álvarez, alcaldesa de Ibias. También Elia Méndez, vecina de Andeo, reconoció no haber podido dormir tranquila, por miedo a que el fuego se extendiera. «Hace dos años hubo otro incendio en el monte de enfrente. Creo que fué un árbol quemado que cayó, y las llamas consiguieron cruzar el río y llegar a Pravias. Casi tienen que desalojar a los vecinos. Hacía mucho viento, y en un momento estuvieron rodeados de fuego, pasaron un buen susto», recuerda Méndez.
Ambas afirman que el despliegue de efectivos fue considerable y eficiente. «Más de cuarenta personas trabajaron al caer el día en la extinción del fuego, incluída la BRIF quién se retiró a media noche» afirma la alcaldesa de Ibias, agradecida de la buena coordinación del servicio de emergencias. El intenso trabajo de los operarios permitió dar por estabilizado el incendio a las 08.14 horas de la mañana, por lo que la llegada de los medios extraordinarios fue cancelada.
«Significa que ya no hay llamas, pero el suelo está muy caliente y puede volver a encenderse», aclaraba Álvarez, quién visitó Andeo. Hace escasamente dos semanas se produjo otro incendio en el mismo monte. «Se comenta que podría haber sido una chispa de una máquina porque estuvieron desbrozando, pero no se sabe», comentan los vecinos, quienes no tienen mucha más información. Los que sí debieran tenerla son la Guardia Civil y las BRIPAS que, según Álvarez, ya se están encargando de las investigaciones.
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