Interior de Santa Cristina de Lena, uno de los inmuebles registrados. J. M. PARDO

La Iglesia registró en Asturias 549 inmuebles de 1998 a 2015

El Ejecutivo central abre la puerta a reclamar casi 35.000 bienes inmatriculados «a la luz de la legalidad» en todo el país durante este periodo

A. COLLADO / A. PANIAGUA

Martes, 16 de febrero 2021

Los bienes inmuebles inmatriculados por la Iglesia católica en Asturias, al amparo de la ley aprobada en 1998 durante el primer gobierno de José María Aznar, suman nada más y nada menos que 549. De ellos, 379 son templos y dependencias complementarias y ... el resto, fincas ajenas a las actividades de culto. Llama la atención que de la cifra global la inmensa mayoría, 517, se registraron gracias a un título de certificación eclesiástica y solo 32 aportaron para su registro un título diferente.

Publicidad

Aparecen en el documento, presentado ya ante el Consejo de Ministros, inmuebles tan conocidos como la Iglesia de San Lorenzo, en Gijón, o las de Santa María la Real y San Juan el Real, en Oviedo. Pero según el Grupo Inmatriculaciones Asturias, liderado por José María Rosell, sigue siendo un listado «incompleto» por varias razones. En primer lugar, porque solo aparecen los registrados a partir de 1998 y no los contabilizados con anterioridad. Y, en segundo, porque «más de la mitad de los inmuebles de la lista, sin la nota simple del Registro, no serán identificables». Un ejemplo: la Iglesia inmatriculó en 2010 –hace poco más de una década– la prerrománica Santa Cristina de Lena (antes ya había hecho lo propio con San Miguel de Lillo y San Julián de los Prados). Pues bien, en el documento que trascendió ayer, la única referencia a la misma aparece como «Número de orden: 37. Municipio: Felgueras. Título: Capilla». «En ese caso, creemos que se refieren a Santa Cristina, pero será muy difícil identificar un gran número de inmuebles por una línea vaga, sin más detalle», explica Rosell.

En todo el país, la Iglesia católica registró en ese periodo 34.961 inmuebles. De todos ellos, 20.055 son templos o dependencias complementarias y 14.906, fincas ajenas a actividades de culto, como viviendas, terrenos y parcelas, entre otras. El Consejo de Ministros estudió este martes el informe realizado por la vicepresidencia del Gobierno y Relaciones con las Cortes Relaciones con las Cortes con el fin de remitirlo al Congreso. La lista de los bienes se podrá someter a consulta pública para que los ciudadanos y administraciones públicas que consideren tener derechos de propiedad sobre ellos puedan presentar peticiones de reclamación.

La Ley Hipotecaria de 1946 ya autorizaba a la Iglesia a registrar inmuebles con solo la firma del obispo. Las disposiciones auspiciadas por el Ejecutivo de Aznar ampliaban esta potestad a los templos de culto. Dicho procedimiento permaneció vigente hasta 2015, año en que se cambio la norma. «Las inmatriculaciones de la Iglesia católica se han producido al amparo de una situación legal. Otra cosa es que haya habido posicionamientos contrarios a la reforma que propició el presidente Aznar», subrayó la vicepresidenta primera, Carmen Calvo.

Publicidad

En 2017 el PSOE promovió en el Congreso una proposición no de ley –con los votos en contra de PP y Ciudadanos– en la que instaba al Gobierno de Mariano Rajoy a hacer un listado de las inmatriculaciones para incluirlas en un registro que posteriormente debería ser enviado a la Cámara baja. Cuando los socialistas llegaron al poder, el Ministerio de Justicia empezó los trabajos que ahora ha concluido el departamento de Carmen Calvo, responsable de las relaciones con las confesiones religiosas.

A partir de ahora es muy probable que se desarrolle un buen número de pleitos. No en vano, muchos ayuntamientos todavía ignoran si algunos inmuebles que habían pertenecido al municipio sin estar a nombre de nadie han sido registrados por la Iglesia.

Publicidad

Entre los monumentos más representativos que ha inmatriculado la Iglesia se encuentra la Mezquita de Córdoba, que la institución eclesiástica registró por 30 euros en 2006. También figuran la Giralda de Sevilla y las catedrales de Sevilla, Zaragoza, Valladolid, del Buen Pastor de San Sebastián, Granada, Jaca y Málaga. Además de este patrimonio, la Iglesia ha puesto a su nombre casas de maestro, plazas públicas y viñedos.

El portavoz de la Conferencia Episcopal, Luis Argüello, expresó su «agrado» por el hecho de que el Gobierno hubiera reconocido que la Iglesia actuó conforme a la ley. «En todo caso, la Iglesia no quiere que esté a su nombre nada que no sea suyo», defendió.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

3 meses por solo 1€/mes

Publicidad