O. E.
GIJÓN.
Lunes, 26 de abril 2021, 01:02
«¿Cuántas familias deben salir relatando la pérdida de horas de atención de sus hijos e hijas este curso para que se reconozca que esto no es un simple cambio de modelo, sino una falta de recursos personales?». Esa es la pregunta que se hacen ... los maestros de Audición y Lenguaje. Y hoy son dos familias más las que explican sus experiencias.
Publicidad
El pequeño Matías, con un Trastorno de Espectro Autista (TEA) que no se comunica, ha comenzado este año la etapa escolar. Y no lo ha hecho como a su familia le hubiera gustado. «Me van a decir que no le han recortado apoyos. Es cierto, directamente no se los han dado», explica su madre, a quien le dieron a firmar «una hoja en blanco, aceptando unos apoyos que no sabía cuáles iban a ser».
Este curso, en el que «Adansi ha sido nuestra salvación», lo dan por perdido. La preocupación ahora es «¿qué pasará el próximo?» Cuanto más tiempo pasen los niños sin apoyos, más oportunidades se pierden.
Como Matías, otro pequeño TEA ha sufrido la situación de este año. En su caso, y pese a los informes psicopedagógicos que insistían en la necesidad de cuidar su ambiente de trabajo, fue incluido en una de las aulas internivel, «sacándole de su grupo de referencia», lamenta su madre, quien se pregunta «¿cuántos niños con NEE se han metido en estos grupos? ¿Ha sido una forma de ahorrar y de sacar de las clases a los que creen que molestan?»
3 meses por solo 1€/mes
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Fallece un hombre tras caer al río con su tractor en un pueblo de Segovia
El Norte de Castilla
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.